Los videojuegos ya no son para adolescentes: así han conseguido abrirse paso entre 20 millones de españoles

En España el año pasado hubo 20,05 millones de videojugadores, la marca más alta desde que la Asociación española del videojuego publica estadísticas. Es casi la mitad del país, frente al estereotipo que los videojuegos son para los adolescentes solitarios encerrados en su cuarto.

Las mujeres ya suponen casi la mitad de los usuarios, aunque los hombres juegan más a menudo.
Y la edad media ha aumentado hasta los 31 años.

¿A qué se debe? Aunque el videojuego nació de la mano de hombres blancos y heterosexuales, en la edad contemporánea hay sitio para cualquiera. Se debe a que las opciones se han multiplicado:

Hay videojuegos que dejan escoger género, incluido el no binario, o decidir la orientación sexual de sus personajes.
Y se da por sentado que el videojuego puede contar ya con cualquier trama, igual que el cine, la literatura o el cómic.

Pero hay una parte negativa. Los videojuegos han aumentado también la adicción. En general, se juega una media de 7,7 horas a la semana en España.

Aunque los expertos llaman a mirar caso por caso, ya que en la estadística se mezclan, por ejemplo, los tiempos muertos con el móvil en transportes, con las jornadas infinitas al mando de otro universo.

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