Ford anuncia un nuevo ERTE en Almussafes por el descenso de la producción

Ford ha anunciado este miércoles la presentación de un nuevo expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) para su planta de Almussafes (Valencia), con 4.800 empleados, debido al descenso de la producción de vehículos y a la falta de suministros para la fabricación de motores, según fuentes sindicales. El expediente que propone la dirección abarcaría del 12 de febrero al 30 de abril, pero UGT, sindicato mayoritario en la factoría, ha avanzado que solo están dispuestos a negociar un ERTE hasta finales de marzo “mientras esperamos noticias sobre inversiones y carga de trabajo”, han expuesto en un comunicado.

La compañía ha propuesto un expediente que afectaría durante dos meses y medio a 750 empleados diarios de la planta de vehículos. Sería además de carácter rotatorio entre toda la plantilla para que ningún trabajador acumulase más de 15 días de suspensión de empleo. En motores, la parada sería equivalente a cuatro días de producción, adelantan los sindicatos.

El anuncio de un nuevo ERTE se produce dos días después de que el vicepresidente de Ford Europa, Kieran Cahill, se reuniese con UGT para trasladarles que la compañía trabaja “en una alternativa” para solucionar la falta de carga de trabajo que se ha originado en la factoría por el retraso en la fabricación de los nuevos modelos eléctricos.

El alto ejecutivo se comprometió el pasado lunes con el sindicato a que en abril mantendrían una reunión con la dirección mundial de Ford y que en ese encuentro se aportarían posibles soluciones, ya que la factoría valenciana se quedará a partir de abril solo con el modelo Kuga, insuficiente para sostener el empleo actual. En ese mes, Almussafes deja de producir definitivamente la furgoneta Transit.

La compañía pidió el pasado día 5 al sindicato un cambio en su posición —la central sindical anunció hace meses que no aceptaría nuevas medidas de regulación de empleo si no se cumplía con el acuerdo por la electrificación—, y ahora UGT accede a valorar nuevas medidas que sirvan para recuperar cierta estabilidad en la planta “siempre que sea por un tiempo breve y sea en consonancia con la fecha de visita de los directivos de Detroit”.

Dos días después del encuentro con la cúpula de Ford Europa, la dirección de la fábrica valenciana ha convocado al comité de empresa a negociar un nuevo ERTE. El sindicato mayoritario considera que los días del expediente y el número de afectados “deberán ir en línea con los problemas que se originen por la falta de producción prevista, y no por el excedente de personal que se está creando en la fábrica” ante la marcha de modelos antiguos y el retraso en la llegada de los eléctricos.

La fábrica valenciana fue en 2022 la elegida por Ford para producir su nueva plataforma de vehículos eléctricos a partir de 2025, una decisión que aseguraba la carga de trabajo en los próximos años y que llevó a un acuerdo con UGT para que el nuevo convenio de la compañía, firmado en abril de ese año, recogiese medidas salariales y de flexibilidad condicionadas a la electrificación. La adjudicación a Ford no evitó que se tuviera que redimensionar la plantilla con un ERE que ha afectado a 1.124 trabajadores.

La compañía se ha presentado a las dos líneas de la nueva convocatoria del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica del Vehículo Eléctrico y Conectado (Perte VEC II). El Ministerio de Industria ha adjudicado 37,6 millones de euros procedentes de la línea de baterías para establecer una planta de ensamblaje en la fábrica de Almussafes y Ford también ha solicitado las ayudas destinadas a la cadena de valor del vehículo eléctrico.

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