El alquiler de temporada se dispara y ya supone el 30% de la oferta en Barcelona o San Sebastián

El portal inmobiliario Idealista ha publicado este jueves un informe que muestra que los contratos de alquiler de temporada (generalmente de menos de un año) tienen cada vez más peso entre la oferta (un 11% en el total y hasta un 30% en Barcelona o San Sebastián), al tiempo que caen los contratos de larga duración, de cinco o siete años. El fenómeno de los alquileres de temporada, que históricamente se utilizaba excepcionalmente para estancias de un año, se disparó en Barcelona coincidiendo con la regulación del precio de los alquileres en Cataluña (entre finales de 2020 y primavera de 2022), y se ha extendido por otras grandes ciudades españolas a medida que la legislación ha regulado más ámbitos del arrendamiento. Los contratos de temporada no están incluidos en la Ley de Vivienda y permiten a los propietarios esquivar cuestiones como el tope de precios (en un contexto de crecimiento sin fin), que el propietario asuma los gastos de la gestión inmobiliaria, y pueden modificar en cada vencimiento. Los alquileres de temporada están sujetos a la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), que sobre el papel obliga a especificar en los contratos que la residencia habitual del inquilino está en otro lugar, así como el motivo del contrato.

En el último trimestre de 2023, señala Idealista, el peso de los alquileres de temporada “llegó hasta el 11% del mercado”, un 58% más respecto a la oferta del año pasado. Y en paralelo, la oferta de alquileres permanentes se redujo un 15%. La ciudad con mayor oferta para estancias cortas es San Sebastián (32%); seguida de Barcelona (30%). Su peso está muy vinculado a la presión del mercado, por ejemplo en las ciudades turísticas: les siguen Cádiz (22%), Valencia (15%), Málaga (14%) y Madrid (13%). Y por debajo figuran Santander (12%), Palma (11%), Bilbao, Girona, Badajoz, Alicante y Tarragona (10% en los cinco casos).

El informe indica que en las grandes ciudades el alquiler de temporada se ha disparado en ciudades como Málaga (se ha más que duplicado en un trimestre), en Valencia se ha duplicado, en Alicante ha subido un 85%, en Sevila un 83%, en Palma de Mallorca un 70% y en Bilbao un 62%. En Madrid, por su parte, la oferta de alquileres temporales ha crecido un 58% en los últimos 12 meses, mientras que se ha incrementado un 53% en Barcelona y un 47% en San Sebastián.

El portavoz de Idealista, Francisco Iñareta, valora que los datos “ponen de manifiesto cómo legislar de espaldas a los propietarios puede acabar destruyendo el mercado”. “Las medidas adoptadas en materia de alquiler han trasladado la oferta del alquiler permanente al alquiler de temporada, una formula perfectamente legal pero que viene a dificultar aún más el acceso a la vivienda de las personas y las familias más desfavorecidas”, alerta, y llama al Gobierno “a reflexionar sobre la idoneidad de sus medidas”.

“En paralelo a estos crecimientos, los alquileres de larga estancia siguen cayendo en este último año en los principales mercados”, apunta el informe. El mayor descenso se da en Bilbao (-38%), seguido por San Sebastián (-32%), Sevilla (-32%), Palma (-26%), Madrid (-25%) y Barcelona (-24%). En los aumentos, el estudio señala que los incrementos “más espectaculares” de oferta de alquiler de temporada “se han dado en pequeños mercados donde este fenómeno era hasta ahora prácticamente inexistente y en los que la aparición de un puñado de anuncios ha provocado subidas muy pronunciadas”. Se refieren a Badajoz (1.133%), Lleida (1.000%) o Ciudad Real (500%).

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