Netflix suma casi seis millones de abonados en el segundo trimestre con su nueva política de cuentas

Netflix alcanzó los 238,4 millones de suscriptores durante el segundo trimestre de 2023, un 8% más que en el mismo periodo del año pasado, gracias a las políticas de control de cuentas compartidas por parte de sus usuarios. En ese periodo incorporó 5,89 millones de clientes, más del doble de lo calculado por Wall Street (2,07 millones), tras tomar medidas enérgicas contra quienes comparten sus contraseñas. Los resultados marcan el mejor segundo trimestre de la compañía desde el punto álgido de la pandemia.

Se trata del mayor número de abonados en la historia de la compañía, que logró un beneficio neto de 1.488 millones de dólares (1.328 millones de euros) sobre unos ingresos de 8.187 millones de dólares, lo que supone un aumento del 2,7% con respecto al segundo trimestre de 2022.

No obstante, la previsión de ingresos del tercer trimestre no alcanzó las expectativas de Wall Street, lo que sugiere que las medidas enérgicas contra el uso compartido de contraseñas y una nueva estrategia publicitaria aún no están produciendo el crecimiento esperado por los analistas. Las acciones de la plataforma cayeron hasta un 6% a 448,88 dólares en las operaciones extendidas, después de subir un 62% este año hasta el cierre del miércoles.

Las cifras presentadas este miércoles están bien “pero no lo suficiente como para hacer subir las acciones, dado el movimiento de los últimos tres meses”, dijo el analista Rich Greenfield, citado por la agencia Bloomberg, tras la publicación de los resultados.

Las ventas de Netflix, líder mundial en el mercado del streaming, aumentaron en el segundo semestre un 2,7%, hasta 8.190 millones de dólares, ligeramente por debajo de las previsiones de los analistas. Ello se debió en parte a las fluctuaciones de los tipos de cambio y a los recortes de precios en algunos mercados.

Este mismo miércoles, la compañía eliminó su plan gratuito de menor precio, empujando a los consumidores hacia un servicio más barato con publicidad o un plan más caro si quieren evitar los anuncios. En mayo, empezó a cobrar a los usuarios de más de 100 países por seguir compartiendo sus contraseñas, un elemento clave de su plan para acelerar el crecimiento tras un flojo 2022. El plan había suscitado controversia entre los abonados, y había dudas sobre cómo afectaría a los resultados. Netflix había advertido de que se produciría un repunte de las cancelaciones al comienzo y que experimentaría un mayor crecimiento en la segunda mitad de este año.

La previsión de ingresos de la empresa para el tercer trimestre, de 8.520 millones de dólares, también quedó por debajo de las estimaciones de Wall Street, que esperaba una media de 8.670 millones de dólares. La empresa dijo que los ingresos procedentes de la publicidad y de las suscripciones adicionales a personas que comparten contraseñas no fueron lo suficientemente importantes como para compensar otros factores, como la falta de aumentos del precio de la cuota de abono, en algunos casos, incluso la rebaja de la misma. “Aunque hemos progresado de forma constante este año, nos queda trabajo por hacer para volver a acelerar nuestro crecimiento”, declaró la empresa en un comunicado sobre la previsión de crecimiento para el tercer trimestre, que cifra en un 7,5%.

Los resultados eran especialmente esperados ante la crisis provocada en Hollywood por la primera huelga simultánea del Sindicato de Actores y del gremio de guionistas en 63 años, que ha paralizado prácticamente la actividad de la industria global del entretenimiento. No parece que el paro masivo haya tenido consecuencias en la actividad de la plataforma y en el comunicado a los inversores sólo hay una referencia al mismo, para indicar que las “previsiones actualizadas” tras los paros tan solo revelan un “gasto menor en contenidos”. La firma asegura que tiene una amplia cartera de estrenos pendiente.

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