Transportes cesa a dos responsables de Renfe y Adif por el error en los trenes de Asturias y Cantabria

Las empresas públicas Renfe y Adif han anunciado este lunes el cese de dos responsables en el marco de la investigación por la chapuza en el proyecto de trenes de vía estrecha para Asturias y Cantabria. Las medidas especificadas por Renfe para una treintena de trenes superaban las dimensiones necesarias para la red de Cercanías de Asturias y Cantabria. Los vehículos fueron diseñados con una altura que impediría su paso por varios túneles. La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, de cuyo departamento dependen ambas entidades públicas, ya había adelantado este sábado, y ha reiterado este lunes, que se producirían destituciones para depurar responsabilidades por lo sucedido.

Por la parte de Renfe, el operador de las líneas ferroviarias, el cese ha recaído en el antiguo gerente del Área de Gestión de Material de Renfe Viajeros, al que se relega de las atribuciones que actualmente tenía en Gestión de Material. Según ha explicado la compañía en un comunicado, este profesional lleva vinculado al Área Técnica y de Material desde 2014; y era gerente cuando en junio de 2020 se adjudicó a CAF la fabricación de los trenes. Un proceso de licitación que, según recuerda Renfe, “se vio afectado por la pandemia”. Aunque el problema principal ha sido descubrir que las medidas que se pasaron al fabricante eran incorrectas, lo que obligará a repetir toda la fase de diseño y retrasará la llegada de los nuevos convoyes.

En Adif, la compañía pública propietaria de las infraestructuras ferroviarias, el destituido es el titular de la jefatura de Inspección y Tecnología de vía. Se trata, ha dicho la entidad en otro comunicado, de una “medida preventiva, a la espera del resultado de la auditoría anunciada por la Ministra de Transportes”. Tanto Adif como Renfe han destacado que colaborarán “con absoluta transparencia” en esa investigación.

Ambas compañías tendrán que enviar también responsables al grupo de trabajo que ha montado Transportes para acelerar la toma de decisiones y enderezar el proceso. Una portavoz ministerial señala que la primera reunión se celebrará “esta misma semana” y contará con participación de los Gobiernos autónomos de Cantabria y Asturias. El objetivo es acelerar al máximo los trabajos para minimizar el retraso en la entrega, aunque se asume que los convoyes llegarán inevitablemente “más tarde de lo previsto”.

De acuerdo con la versión de Transportes, los 31 trenes (21 para Cantabria y 10 para Asturias) estaban prometidos como pronto para principios de 2024 y evitan, de momento, poner plazo hasta que se detalle con el fabricante. El error de cálculo en altura que impediría a los convoyes pasar por algunos túneles de las líneas de Cercanías de ambas comunidades se produjo “en la fase de diseño”. Por eso, en el ministerio destacan que ni se ha fabricado tren alguno que haya que aparcar ni el error ha supuesto un gasto de dinero público. Lo que sí conlleva es la necesidad volver a diseñar los trenes y, por tanto, retrasar su construcción.

Mientras tanto, avanzarán en paralelo la auditoría interna en ambas empresas públicas para depurar responsabilidades y las reuniones del grupo de trabajo que se ha montado para evaluar el proyecto, con participación de responsables políticos cántabros y asturianos después de que ambos Ejecutivos, especialmente el primero, hayan puesto el grito en el cielo por lo sucedido.