La SEPI rechaza el rescate de Ezentis y la acerca a la quiebra

La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) ha rechazado el rescate urgente que solicitó la compañía de tendido de redes de telecomunicaciones Ezentis por 70 millones de euros, según ha notificado este viernes la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que ha suspendido la cotización de la firma. Desde principios de año, los títulos de la empresa se dejan más de un 37%.

La empresa, participada mayoritariamente por José Elías, fundador de Audax Renovables, ha asegurado que la SEPI ha rechazado el expediente porque es “inviable” aprobar las ayudas antes de que expire el fondo de 10.000 millones creado por el Gobierno español para hacer frente al impacto de la pandemia del coronavirus el próximo 30 de junio.

La SEPI, que no se ha pronunciado oficialmente sobre el expediente de Ezentis, aprobó con carácter de urgencia el pasado 17 de junio la ayuda solicitada por la compañía siderúrgica catalana Celsa España, por 550 millones de euros, en el mayor rescate de una empresa hasta la fecha por los efectos de la covid-19. Esa inyección a través de dos créditos, sin embargo, está condicionada a que la Comisión Europea la apruebe y que la dirección de la acerera y los ocho fondos que controlan la mayor parte de su deuda se pongan de acuerdo con los requisitos establecidos por la SEPI para aportar recursos públicos: una reducción del pasivo de 1.200 millones de euros. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, medió con el consejero delegado de Deutsche Bank, Christian Sewing, para que el banco alemán, uno de los acreedores acercara posiciones con Celsa, cuyo rescate demandó el Gobierno de la Generalitat catalana.

La sociedad pública presidida por Belén Gualda también ha rechazado el rescate de la empresa sevillana Abengoa por 249 millones y con 11.000 puestos de trabajo en el aire. La portavoz de la SEPI no ha atendido el requerimiento de este diario sobre las razones para rechazar el expediente de Ezentis.

Tras la negativa de la SEPI, Ezentis ha comunicado que se encuentra “analizando otras alternativas para la refinanciación de la deuda”, pero tendrá difícil acometer el pago de una deuda financiera de 157,3 millones de euros al cierre del primer trimestre de 2022, que ya ha comenzado a impagar. La situación financiera es crítica en una empresa que emplea a cerca de 9.000 trabajadores.

Entre las entidades acreedoras de Ezentis se encuentran los fondos Arcano y Muzinich, así como entidades bancarias como el BBVA, Banco Pichincha, Banco Santander, CaixaBank y EBN. Ezentis perdió 139,6 millones de euros en 2021, algo más del triple que los 40,1 millones negativos que registró en 2020, tras el saneamiento contable de los activos que poseía en varios países de Latinoamérica, de los que ha decidido salir para centrar sus operaciones en Europa, según informó en un comunicado.

Además, en la junta general de accionistas celebrada el pasado lunes, el presidente del consejo de administración de Ezentis, Enrique Sánchez de León, aseguró que están “estudiando las acciones legales que se pudieran corresponder” tras identificar “una serie de irregularidades contables” que afectaron a la información presentada a ejercicios anteriores al 2021 por importe conjunto de 12,4 millones.

Ezentis registró el año pasado unas pérdidas netas de 139,6 millones de euros, más que triplicando el resultado negativo de 43,1 millones de euros de 2020, debido principalmente a las provisiones realizadas por el deterioro de sus activos en países de Latinoamérica, a resultados no recurrentes y al deterioro de activos por impuestos diferidos. El grupo, especializado en el despliegue, operación y mantenimiento de infraestructuras de telecomunicaciones y energía de grandes multinacionales, tomó la decisión de cesar su actividad en Chile, Perú y México tras haberse frustrado la venta de los activos que tenía en estos países. Ahora quiere centrar su actividad comercial en Europa, donde se concentra la mitad de su cartera actual de 470 millones de euros, y participar en los despliegues de fibra en Alemania y Brasil, como primer proveedor de Telefónica.

En crisis permanente

La historia de Ezentis es la de una crisis permanente casi desde su nacimiento. Su germen está en la antigua Radiotrónica, luego reconvertida en Avanzit y finalmente renombrada como Ezentis en 2010, con cambio de sede a Sevilla. La dependencia de los pedidos de Telefónica —su principal cliente con más del 50% de su cartera actualmente— y su errática gestión con la entrada en negocios como la producción audiovisual o la construcción que nada tenían que ver con su actividad principal de tendido de redes de telecomunicaciones, han deteriorado sus finanzas, con escándalos de corrupción que han llevado a varios de sus antiguos gestores a los tribunales.

José Elías Navarro, presidente de Audax Renovables y dueño de La Sirena, tomó la mayoría del capital de la compañía a comienzos de 2021 e intentó sin éxito fusionarla con la filial de renovables Rocío Servicios Fotovoltaicos, al obligarle la CNMV a lanzar una opa por el total del capital