Empresas y hogares afrontan la crisis con más ahorros y menos deuda
La deuda de empresas y familias se redujo hasta el 130% del PIB el año pasado frente a casi el 185% de 2013
La riqueza financiera neta de las familias españolas e instituciones sin fines de lucro al servicio de los hogares (ISFLSH) se situó en 1,643 billones de euros en el cuarto trimestre de 2019, lo que supone un repunte del 10% en tasa interanual, según las Cuentas Financieras publicadas por el Banco de España este miércoles.
De esta forma, la riqueza de las familias sigue en máximos y se sitúa ya muy por encima de los niveles de la crisis económica, ya que en diciembre de 2012, al concluir la recesión, no llegaba al billón de euros, y se situó en 981.000 millones, informa el Banco de España.
Por su parte, la deuda consolidada de las empresas y de los hogares e ISFLSH2 alcanzó 1,61 billones en el cuarto trimestre de 2019, un 129,7 % del PIB, 4,5 puntos porcentuales (pp) por debajo de la ratio registrada un año antes. Si mira con más retrospectiva, la caída es muy significativa porque en 2013 casi alcanzó el 190% del PIB. Esta posición le otorga una ventaja a empresas y hogares para entrar en la nueva crisis de la pandemia porque tendrán más capacidad para endeudarse.
La deuda consolidada de las sociedades no financieras representó un 72,8 % del PIB (si se incluyese la deuda interempresarial, la ratio sería un 93,1 %), mientras que para los hogares e ISFLSH fue un 56,9 %.
El Banco de España explica que, en relación con el PIB, los activos financieros netos representaron el 132%, ratio 7,7 puntos porcentuales superior a la de hace un año. El saldo de activos financieros -dinero en efectivo, acciones, depósitos y valores en renta- de los hogares e ISFLSH alcanzó a finales de 2019 un importe de 2,410 billones de euros, un 6,7 % superior al de un año antes.
Este aumento fue el resultado de una adquisición neta de activos financieros de 43.000 millones de euros en 2019 y de unas revalorizaciones netas de 109.000 millones de euros, debidas, fundamentalmente, al incremento del precio de los activos de renta variable, informa Europa Press. En relación con el PIB, los activos financieros totales de los hogares e ISFLSH representaron un 193,6% a finales de 2019, lo que significa 5,7 puntos porcentuales más que un año antes.
Cae el dinero en depósitos y sube la inversión en fondos
Por componentes, el grueso de los activos financieros de los hogares se encontraba en efectivo y depósitos (el 38% del total), seguido de participaciones en el capital (28%), seguros y fondos de pensiones (16%) y participaciones en fondos de inversión (14%). Las participaciones en fondos de inversión fueron el componente que más incrementó su peso en los activos financieros de los hogares (en 0,4 puntos porcentuales) con respecto a un año antes, mientras que el peso del efectivo y depósitos fue el que más cayó (-0,9 puntos porcentuales).
Desde 2012 las participaciones en el capital y en fondos de inversión han subido un 65%, al pasar de 620.000 millones a 1,02 billones, debido, entre otras razones a la revalorización de las acciones y las participaciones en instrumentos de inversión colectiva.
Por su parte, la deuda consolidada de las empresas y de los hogares e ISFLSH alcanzó 1,615 billones de euros en el cuarto trimestre de 2019, un 129,7% del PIB, 4,5 puntos porcentuales por debajo de la ratio registrada un año antes.
La deuda consolidada de las sociedades no financieras representó el 72,8% del PIB (si se incluyese la deuda interempresarial, la ratio sería un 93,1%), mientras que para los hogares e ISFLSH se situó en el 56,9% del PIB, hasta los 767.267 millones de euros. En 2019, el flujo neto de financiación consolidada recibida por las empresas y los hogares e ISFLSH fue de 8,2 billones de euros, lo que representó un 0,7% del PIB.
La financiación nueva captada por las sociedades no financieras registró, en términos netos, un flujo del 0,5% del PIB, mientras que en los hogares e ISFLSH representó el 0,1% del PIB. Las operaciones financieras netas de los sectores residentes (empresas, hogares, instituciones financieras y administraciones públicas) registraron en 2019 un superávit de 29.000 millones de euros, equivalente al 2,3% del PIB, frente al 2,4% observado en 2018.
Obtuvieron un saldo positivo las instituciones financieras (2,6% del PIB), los hogares (2,2%) y las empresas (0,2%), mientras que las administraciones públicas mostraron un saldo negativo del 2,6% del PIB.
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