_
_
_
_
_

La montaña rusa de Parques Reunidos

La compañía, que cae en Bolsa un 28% en el año, busca nuevo consejero delegado tras revisar a la baja sus previsiones

Montaña rusa en el Parque Warner de San Martín de la Vega (Madrid). 
Montaña rusa en el Parque Warner de San Martín de la Vega (Madrid). 

Parques Reunidos es sinónimo de diversión, pero ahora mismo las cosas en sus oficinas no están para muchas risas. La compañía es uno de los principales gestores de ocio del mundo con 60 parques en 14 países (en Madrid operan el Parque de Atracciones, el Parque Warner y Faunia, entre otros). Esta cartera de activos, sin embargo, no impide que sus cuentas se resientan desde hace dos años, circunstancia que le ha costado el puesto recientemente a su consejero delegado, Fernando Eiroa.

En 2016, el beneficio de Parques Reunidos tocó techo con 61,1 millones de euros, pero ya el pasado año bajó a 51,4 millones. Y las cifras para este año —su ejercicio fiscal se cierra en septiembre —no van a cumplir los objetivos anunciados. A principios de octubre, el grupo advertía al mercado de su crecimiento en ingresos y resultado de explotación (Ebitda) sería “de sólo un dígito”. En un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el grupo atribuye la desaceleración del negocio a unas condiciones climatológicas “desfavorables” y a determinadas áreas de mejora en “ejecución en términos de impacto comercial, gestión de costes operativos y planificación de inversión”.

Concretando más sus estimaciones, desde Parques Reunidos explican a EL PAÍS que el Ebitda crecerá entre el 1% y el 5% frente a la previsión de mejora inicial del 10%. Estas fuentes insisten en el factor climático (primavera muy lluviosa en España y ola de calor en el centro y norte de Europa), pero apuntan a que “estamos diversificando la actividad”. En este sentido, han comprado en 2018 un parque de ocio (Belantis en Alemania) y un parque acuático (Wet´n´Wild en Australia). “Y seguimos analizando otros formatos de ocio interior”.

César Sánchez-Grande, director de análisis de Ahorro Corporación considera que la compañía tiene unos gestores muy experimentados pero su punto débil es la estacionalidad, ya que el 95% del Ebitda se genera en verano. “Un buen indicador de su buena gestión es que ha sido el salvavidas de parques impulsados por Comunidades Autónomas como el Tecnológico de Valencia, la Warner o Faunia”, explica. Pero desde la empresa también entonan un mea culpa: “Somos conscientes de que se podrían haber hecho mejor las cosas en gestión de costes, promociones y descuentos en nuestros parques, o en el ritmo de ejecución de inversiones”, añaden.

El grupo atribuye a la mala climatología la desaceleración de los resultados

En este sentido los analistas creen que deberían hacer más hincapié en la venta de pases de temporada para conseguir unos resultados más previsibles. Sánchez-Grande explica también que Parques Reunidos tiene una buena salud financiera con una relación de deuda de 2,5 veces su Ebitda. “La compañía tiene un buen flujo de caja y la deuda no es un problema”.

Corporación Financiera Alba, el brazo inversor de la familia March, es uno de los principales accionistas de la compañía con un 20% del capital y dos puestos en el consejo de administración. Fuentes de esta entidad explican que pese a las expectativas de menores ingresos “somos muy optimistas sobre la compañía y su potencial sigue intacto. La culpa ha sido de la climatología adversa, pero los proyectos de expansión son potentes y sus planes actuales y los previstos nos llevan a tener el mismo entusiasmo que cuando entramos en Parques”.

Voto de confianza

En Alba se muestran cómodos con su participación actual, aunque tampoco contemplan aumentarla. “No es nuestra filosofía de inversión. Normalmente invertimos entre un 10% y un 15% y alcanzamos como mucho un 20% del capital, nivel donde nos sentimos cómodos”, dicen. El otro accionista de referencia de Parques Reunidos es Groupe Bruxelles Lambert, que suma otro 20% del capital.

El reconocimiento de unos resultados menores de los previstos (profit warning) ha acelerado la caída en Bolsa de Parques Reunidos. En lo que va de año, los títulos pierden un 28% de su valor. Mientras Alba y Lambert no han variado su paquete accionarial, otros accionistas significativos sí han aprovechado las caídas para reforzar su posición. El fondo Coltrane, radicado en las Islas Caimán, ha pasado de tener el 6% del capital a controlar el 8%. También ha incrementado posiciones Alantra —la antigua N+1— hasta el 6,1% desde el 5%. Desde Parques Reunidos ven muy positivos estos movimientos de toma de participación. “Que estén reforzando su apuesta por la compañía accionistas que ya lo eran, después del aviso de menor crecimiento de resultados, es un mensaje de confianza”, argumentan.

La compañía está ahora en pleno proceso de selección de un nuevo consejero delegado. Hasta que den con la persona idónea se ha hecho cargo de la compañía el presidente no ejecutivo, Richard Golding. Uno de los temas a resolver por el consejo está relacionado con la política retributiva de la compañía. Aún no hay una decisión tomada sobre el dividendo con cargo al ejercicio 2018 y su cuantía dependerá de cuál sea el beneficio definitivo. “Mantenemos nuestra filosofía de crear valor y remunerar al accionista en función de los beneficios”, afirman las fuentes de la compañía consultadas.

Los inversores profesionales siguen dando un voto de confianza al grupo. BBVA, aunque mantiene un consejo negativo sobre los títulos (recomienda a sus clientes infraponderarlos en las carteras), concede una valoración o precio objetivo a Parques Reunidos de 12,5 euros por acción, un 15,5%  por encima de su cotización actual. Más optimistas incluso son los analistas del Banco Santander, que tasan los títulos del grupo en 16,8 euros.

Por otra parte, los fondos de inversión también siguen manteniendo el interés por el valor. Parques Reunidos forma parte de la cartera del fondo Cobas Ibérica gestionado por el equipo del famoso gestor Francisco García Paramés que invirtió a finales del pasado trimestre el 1,2% del patrimonio de su fondo en la compañía. Desde la gestora Cobas indican que pese a las últimas noticias de dimisiones y menores crecimientos mantiene su posición. “Somos un fondo con una estrategia que busca empresas de valor y no venderemos hasta lograr el precio adecuado que teníamos pensado al hacer esta inversión”. También el fondo Small Caps de Banco Santander, gestionado por Lola Solana, tiene a Parques Reunidos en su cartera con un peso en el mismo del 0,78% del mismo y un 0,90% en el fondo Santander Acciones Españolas, según el su último informe trimestral.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_