Seat echa a rodar su nuevo modelo: Tarraco
El nuevo todoterreno busca catapultar el prestigio de la marca y ganar márgenes para futuras inversiones
El Seat Tarraco está listo. El nuevo todoterreno de la marca española del grupo Volkswagen fue presentado este martes en Tarragona, la ciudad que le brinda el nombre, con la vitola de estar llamado a ser "el emblema" de la marca. El Tarraco, diseñado en Martorell (Barcelona) pero fabricado en la factoría alemana de Wolfsburgo (Alemania), completa el tridente de Seat para competir en el reñido mercado de los SUV, los populares todoterrenos de asfalto. La versatilidad es su punto fuerte, ofrece cinco o siete plazas, y comparte una línea muy parecida a la de sus hermanos pequeños, Ateca y Arona.
El Tarraco saldrá a la venta a principios del próximo año con un precio base cercano a los 30.000 euros. Seat aprieta el acelerador para no perder comba en el goloso segmento SUV, un mercado con un potencial formidable: se calcula un crecimiento del 40% hasta 2025. La compañía admite que el Tarraco debe desempeñar un papel "fundamental" para afianzar la posición de privilegio que ha logrado la marca: entre enero y agosto entregó 383.900 vehículos en todo el mundo, lo que representa un incremento del 21,9% con respecto al mismo periodo de 2017.
El presidente de Seat, Luca de Meo, aprovechó la presentación del nuevo vehículo para destacar que la estrategia de la firma pasa por dejar la relajación en la cuneta: "Seat ha lanzado su mayor ofensiva de productos de los últimos tiempos", dijo, para añadir que el Tarraco forma parte de la inversión de 3.300 millones de euros previstos, entre 2015 y 2019, para galvanizar el futuro de la compañía y dar atractivo a su gama de vehículos. “El Tarraco se suma a nuestra familia SUV para responder a las necesidades de cada cliente”, ha dicho este martes de Meo.
La nueva apuesta nace con el reto de saldar una asignatura pendiente, romper el estigma que identifica a Seat como una marca dudosa para otorgarle una posición preferente en el garaje de casa. El propio de Meo hizo referencia al lastre que padece Seat por verse históricamente como una marca de segundo vehículo. "Buscamos un impacto sobre la credibilidad e imagen de Seat", ha comentado el presidente de la compañía.
Seat no facilita datos sobre previsiones de ventas, pero de Meo ha relevado que el plan pasa por convertir al Tarraco en el quinto producto más vendido de la marca, tras León, Ibiza, Arona y Ateca, lo que dibuja un horizonte por debajo de las 75.000 unidades anuales.
A la cúpula de Seat no le preocupan las turbulencias que sacuden al mercado del diésel. "Seguimos invirtiendo en diésel", dijo el presidente, pero también admitió que, a medio plazo, el Tarraco tendrá una versión híbrida. De hecho, uno de los objetivos confesados de la marca con el Tarraco tiene que ver con el reto de maximizar márgenes y hacer caja para poder afrontar las inversiones tecnológicas que va a exigir el mercado.
“Es una obra maestra en cuanto a funcionalidad y versatilidad" señaló el vicepresidente ejecutivo de Investigación y Desarrollo, Matthias Rabe.
Todos los motores incorporan inyección directa, turbocompresor y la tecnología Start&Stop, con potencias de 150 y 190 caballos (CV). Habrá dos variantes de gasolina TSI: un cuatro cilindros y 1.5 litros con 150 CV, caja de cambios manual de seis velocidades y tracción delantera, y un bloque 2.0 litros de cuatro cilindros con 190 CV, asociado a una caja de cambios automática DSG de siete relaciones y sistema de tracción total 4Drive. En cuanto a los diésel, habrá dos opciones disponibles, ambos TDI de cuatro cilindros y 2.0 litros, con potencias de 150 y 190 CV. La variante de 150 CV puede equiparse con tracción delantera y un cambio manual de seis velocidades, o bien asociado a una caja de cambios DSG de siete relaciones con el sistema 4Drive de tracción total. La versión más potente solo estará disponible con cambio DSG de siete velocidades y sistema 4Drive. El Tarraco se comercializará posteriormente con otras tecnologías de propulsión alternativas.
El nombre Tarraco salió vencedor de un concurso popular, donde votaron 140.000 personas, para escoger cual era la denominación más idónea para bautizar a la nueva joya de la marca.
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