¿Quieres estudiar la carrera en Reino Unido sin arruinarte? Aprovecha antes del Brexit
El prestigio de las universidades y un interesante sistema de créditos llevan a 12.000 estudiantes españoles al país cada año
Oxford y Cambridge. Cambridge y Oxford. Son universidades míticas que lideran año tras año los rankings de los mejores centros de formación superior no solo de Reino Unido, sino del mundo entero. Acumulan tantos premios Nobel salidos de sus aulas, como el científico Stephen Hawking, que son la punta de lanza de un sistema educativo que goza de un gran prestigio. Los españoles somos conscientes de esta fama y por eso Inglaterra, Escocia y Gales son la tríada de destinos preferidos por los estudiantes de nuestro país cuando de estudiar fuera se trata. Y van a más. De hecho, según los datos que maneja el British Council en Madrid, 12.020 residentes en España hicieron un grado (8.215) o un posgrado (3.805) en Reino Unido durante el pasado curso, mientras que en el anterior (2015-2016) fueron 10.890.
Pero se acerca el Brexit. En 2019 los británicos ya no formarán parte de la Unión Europea (UE) y previsiblemente esto se dejará notar en el poder de atracción del país para los estudiantes europeos. De ahí que las universidades inglesas estén echando el resto fuera de su territorio para poder atraer alumnos extranjeros (reciben 437.000 foráneos cada año).
Fondos públicos sufragan la formación de los extranjeros hasta que la puedan pagar, cuando cobren unos 24.000 euros anuales
“La campaña de Reino Unido para promocionar su educación es bestial”, afirma Sandra Páramo, asesora de la firma IEC, especializada en enviar jóvenes a estudiar a otros Estados. “Notamos más esfuerzo por parte de las universidades británicas, que no quieren renunciar al talento internacional”, apoya Miguel Morán, directivo de la consultora Círculo de Formación, que promueve ferias educativas, en las cuales la presencia de los centros británicos es creciente. Por dos motivos: para mantener sus cifras tras el Brexit y porque cada vez más jóvenes españoles quieren formarse en el exterior.
El próximo curso están “absolutamente garantizadas” las condiciones actuales para los alumnos europeos, asegura Carolina Jiménez, responsable de Educación del British Council en España: podrán permanecer en el país mientras dure su formación como si Reino Unido no hubiese salido de la UE. Y se rumorea que también permanecerán así durante el curso 2019-2020.
Financiación asistida
En esas condiciones hay un aliciente clave, las ayudas estatales para cursar los estudios. El Gobierno financia las 9.250 libras (10.500 euros) anuales que cuesta como máximo un grado en las universidades públicas (un precio semejante al que barajan los centros privados en España, explica Jiménez) aunque el estudiante tarde en acabar seis años, añade.
Y lo hace a largo plazo, de manera que mientras el alumno no termine su carrera, trabaje y gane más de 21.000 libras al año (unos 24.000 euros), no tendrá que devolver ni un solo euro de los invertidos en sus tres o cuatro años de formación, los que habitualmente duran los grados allí. Todos los ponen las arcas públicas (en el caso de los alumnos nativos, además de los costes universitarios, se financian los de alojamiento y manutención). Y, también, se pagan en cómodos plazos, de 30 libras mensuales cuando se ganan 25.000 al año, de 60 libras si el salario es de 30.000 y de más de 200 libras al mes si la remuneración es de 50.000, según IEC.
Los trámites
Pese a que el plazo de matriculación principal expiró el 15 de enero, advierte el British Council, los estudiantes españoles que quieran hacer un grado en Reino Unido están a tiempo hasta el 30 de junio, cuando vence el segundo plazo. Eso sí, tienen que optar a ello universidad a universidad, en vez de hacerlo a cinco a la vez. Necesitan las notas de la ESO, primero de Bachillerato y segundo, si lo tienen; en caso contrario, una estimación de la evaluación esperada, y un buen nivel de inglés (probado o estimado). Se requiere una solicitud y una carta de presentación tipo currículo, donde se valora mucho a la persona, sus etapas de voluntariado o sus viajes, su madurez.
Cuando se trata de cursar posgrados, los créditos a los estudiantes extranjeros cubren hasta 10.280 libras, indica Rosalía Castro, representante en España de University College Birmingham, que exhibe este hecho como clara ventaja de la academia británica frente a las demás en las ferias en las que participa.
Este préstamo es un espaldarazo para los alumnos que eligen Gran Bretaña por el prestigio de sus universidades y por la oportunidad de vivir en inglés que representa, indica Miguel Morán. Pero no hay que olvidar que, pese a contar con él, el desembolso a realizar sigue siendo fuerte, advierte Sandra Páramo, que calcula que el estudiante puede gastar entre 800 y 1.000 euros adicionales al mes en alojamiento y manutención.
Para quienes ya están convencidos, es interesante saber que los estudiantes españoles viajan a Reino Unido para matricularse, por este orden, en el Imperial College of Science de Londres, el University College London, la Universidad de Edimburgo, la de Mánchester, el Kings College de Londres, la Universidad de Glasgow, la de Southampton, la Universidad de Artes de Londres, Cranfield University y la Universidad de Bath; todas ellas con más de 200 estudiantes españoles.
Respecto a los grados preferidos, destaca de largo Dirección y Administración de Empresas, seguido de Ingeniería y Tecnología, Arquitectura, Estudios Sociales, Artes Creativas y Diseño y Ciencias Biológicas, según Carolina Jiménez.
Esta experta señala tres ventajas del sistema educativo británico sobre el español: que es mucho más práctico y cuenta con apoyo personalizado para el alumno, que la tasa de fracaso es bajísima (fundamentalmente porque los estudiantes se responsabilizan al ser ellos los que costean su formación, no sus padres, de ahí la importancia de los préstamos) y el porcentaje de colocación supera el 86%.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.