Moody’s también mejora la calificación de la deuda española

La agencia de calificación Moody's ha mejorado la calificación de la deuda española. Desde 2014, la calificadora estadounidense no había elevado. Y entonces lo situó en Baa2. Fue la primera mejora que aplicó tras la crisis y ahí ha estado, dos peldaños por encima del llamado bono basura, durante los últimos cuatro años. La de ahora es la siguiente y ha situado a España en Baa1, o sea, una mejora de un peldaño, y mantiene la perspectiva en situación "estable".

Con esta subida, Moody's se convierte en la última de las tres grandes calificadores que suben la nota de la deuda española. En enero lo había hecho Standard & Poor's, que situó el nivel en A- desde BBB+. Es decir, un escalón. En marzo fue Fitch, exactamente igual que S&P. La semana pasada les emuló la canadiense DBRS, que según su nomenclatura elevó la calificación de A baja a A.

Para la agencia, “el factor clave” es la mejora en “la mejora de la resistencia [de la economía español] por el balance equilibrado de su crecimiento y la mejora del sector bancario, que ahora compensa el freno que suponen los factores institucionales y políticos”. La agencia no ignora la situación en Cataluña ni la debilidad institucional en los últimos años. Sin embargo, subraya que las mejoras de los últimos años “están lo suficientemente consolidadas para mejorar la calificación”.

Nada más conocerse la calificación de la agencia, el nuevo ministro de Economía, Román Escolano ha reaccionado apuntando que, "como sus homólogas, Moody’s reconoce que se han producido cambios estructurales importantes propiciados por las reformas que hemos llevado a cabo en los últimos años". También subraya el ministro que "todas las agencias han reconocido una menor incertidumbre derivada de la situación política en Cataluña". 

Junto a la mejora de la calificación de la deuda soberana, Moody's también ha incrementado la calificación que otorga al FROB, el Fondo de Reestruturación Ordenada Bancaria. La ha subido de Baa2 a Baa1, como en el caso de los bonos soberanos, y también en esta caso los mantiene con perspectiva estable.