El cable submarino de Facebook, Microsoft y Telefónica llega a España
El barco que tiende el Marea arribará a las costas de Sopelana el día 13 tras un viaje de tres semanas y más de 6.000 kilómetros desde EE UU
El Marea, el cable submarino de Telefónica (Telxius), Microsoft y Facebook que mejorará la conexión entre los usuarios de Estados Unidos y Europa, llegará a las costas españolas el próximo día 13, tras un viaje de tres semanas.
El barco cablero que lo despliega por todo el océano Atlántico salió el pasado 24 de mayo de las costas de Virginia, recalará en Calais el 9 de junio para, finalmente, amarrar el cable de 6.000 kilómetros de longitud en la playa de Arritera en Sopelana (Vizcaya), el próximo día 12 de junio
Previamente, la sociedad tripartita que explotará Marea ha tenido que obtener los permisos de extensión de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, por sus siglas en inglés) estadounidense y del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente español. Las licencias de ambas autoridades, conseguidas el pasado mes de abril, tienen una duración de 25 años, informaron a este diario en fuentes del consorcio.
Canon por ocupación
La concesión a Telxius se refiere a la ocupación de 27.861 metros cuadrados de dominio público marítimo-terrestre, de titularidad estatal. De ese total, 16.701 metros cuadrados corresponden a ocupación en el mar territorial, 10.868 m2 en las aguas interiores y 290 m2 en el tramo terrestre. Telxius abonará en el Tesoro Público el importe correspondiente al canon, calculado a razón de 1,2391 euros por metro cuadrado y año de la superficie de dominio público marítimo-terrestre otorgada en la concesión, es decir, alrededor de un millón de euros en todo el periodo de concesión.
El cable ocupa cerca de 28.000 metros cuadrados
La capacidad de Marea es de 160 terabytes por segundo (Tbps), dividida en ocho pares de fibra de 20 Tbps cada una, 16 millones de veces más rápido que una conexión de Internet doméstica, lo que lo convierte en el cable transatlántico con la banda más ancha que existe.
El cable, situado más al sur que otros cables transatlánticos existentes, será operado y gestionado por la filial de Telefónica Telxius y será el primero en conectar el importante nudo de conectividad del norte de Virginia en Estados Unidos con Europa al tiempo que permitirá la interconexión con otros sistemas de cable submarino para alcanzar Oriente Próximo, África y Asia.
El diseño de Marea ha sido concebido como una infraestructura abierta lo que permitirá operar con tecnología de múltiples fabricantes y su futura adaptación tecnológica.
Tras meses de estudios y exploración, las óptimas condiciones para el amarre en playa de Marea así como su localización estratégica como punto de interconexión hacia el norte de Europa y el resto de España convirtieron a Sopelana en el punto ideal de la costa cantábrica para el despliegue de este cable a este lado del Atlántico.
Marea es un cable fabricado por capas para proteger la fibra óptica situada en el centro. En el exterior hay una capa protectora de polietileno y, debajo de este material, una capa de acero trenzado que protege una barrera de aluminio destinada a evitar filtraciones de agua. Antes de llegar a la fibra óptica que transporta los datos hay una capa de policarbonato y un tubo de cobre. TE Connectivity ha sido la empresa encargada de suministrar el cable submarino.
En el despliegue se presta especial atención al impacto medioambiental del proyecto. Así, se establece que cualquier incidencia en el medio ambiente que pueda surgir en el proceso de ejecución de las obras, serán observadas por el servicio Periférico de Costas, exigiéndose un proyecto de acondicionamiento y mejora del entorno ambiental, si se considera necesario.
El nuevo cable ayudará a cubrir la creciente demanda por parte de los usuarios de alta velocidad y conexiones fiables para los servicios en la nube y online. Junto a Facebook y Microsoft permitirá a Telxius no solo ampliar la capacidad on-net entre España y Estados Unidos, sino también abrir oportunidades de mercado en Europa Occidental y nuevas rutas emergentes en el norte de África y otras regiones.
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