S&P saca a Bankia de bono basura después de cinco años

La agencia de calificación de riesgos S&P ha revisado la nota de varias entidades bancarias españolas. Destaca la decisión sobre Bankia: cinco años después abandona el escalón de bono basura, la nota reservada a las inversiones consideradas de alto riesgo. Se une así a la decisión que ya tomó otra de las grandes agencias del sector, Fitch, hace cerca de un año, cuando también elevó al banco nacionalizado a la categoría de inversión no especulativa. Además, la agencia estadounidense S&P ha subido el rating de Bankinter, Ibercaja y Abanca. Por otra parte, a Santander y CaixaBank les ha mejorado las perspectivas a “positivas”.

La opinión sobre los bancos españoles es en general optimista. “En nuestra opinión, el sistema bancario español ha absorbido ampliamente el coste de la explosión de la burbuja inmobiliaria y la posterior recesión económica”, concluye en su informe. “Esperamos que la recuperación económica continúe y que el mercado inmobiliario gane más dinamismo”, destaca S&P. Y abunda en esa línea: “Los avances en materia de consolidación fiscal y una alineación duradera de las condiciones crediticias con otros socios de la zona euro pueden en última instancia reforzar la capacidad de recuperación de la economía frente a los shocks”.

En concreto, la agencia de crédito ha elevado la nota de Bankia de BB+ a BBB-, es decir, justo un escalón por encima del llamado bono basura. A Bankinter le revisa la calificación de BBB- a BBB, es decir, un escalón al alza, en la parte del aprobado. Al Santander lo deja en la zona de los alumnos aventajados (A-), similar a un notable en esta escala de riesgos para inversores), pero le mejora la perspectiva a positiva. Es decir, que de seguir así podría elevar su nota en una futura revisión. A CaixaBank (BBB), Kutxabank (BBB-) y Caja Laboral (BBB-) también les mantiene el aprobado y les cambia su perspectiva a positiva. En cambio, Popular tiene peor horizonte: su nota sigue en B+, dentro del bono basura, y su perspectiva pasa de positiva a “estable”, lo que no augura mejoras en su calificación a corto plazo. BBVA (BBB+) y Sabadell (BB+) se mantienen sin variaciones.