La industria del tabaco resiste pese a las nuevas normas de etiquetado

Las ventas de tabaco en España alcanzaron el año pasado 11.857 millones de euros, apenas un 0,4% menos que el año anterior. Los cigarrillos supusieron cerca de nueve de cada 10 euros de las ventas, con 10.311 millones de euros, seguidos de la picadura de liar, con 1.000 millones, según los datos del Comisionado para el Mercado de Tabacos, dependiente del ministerio de Hacienda. La actividad reportó al fisco 9.110,5 millones de euros en impuestos, casi exactamente lo mismo que el año anterior (9.137,6 millones), según los datos de la Asociación Empresarial del Tabaco (Adelta), que ha calificado como “complejo” el año recién terminado, por la entrada en vigor de nuevas normas que obligaron a cambiar el etiquetado y envasado.

Se refiere la patronal del sector a la entrada en vigor en mayo de la Directiva europea de Productos del Tabaco, que “implica cambiar el envasado y etiquetado de 70.000 referencias europeas de productos del tabaco, lo que ha obligado a su vez a modificar todos los procesos de fabricación, impresión y a adquirir nueva maquinaria, con la presión añadida de plazos muy ajustados para su cumplimiento”, según afirma Juan Páramo, director general de ADELTA, en un comunicado. La directiva obliga, entre otras cosas, a que las cajetillas y otros envases incluyan claramente la leyenda “Fumar mata” y otras advertencias sanitarias.

Aunque la directiva establece su entrada en vigor el 20 de mayo de 2016, la ausencia de Gobierno en España el año pasado ha hecho que aún no haya sido traspuesta al ordenamiento jurídico español. Pese a ello, según Páramo, la industria “ha tomado la iniciativa” y ha adaptado a los nuevos requisitos la mayoría de cajetillas de cigarrillos y envases de tabaco de liar. De hecho, Páramo reclama la trasposición “urgente” del texto europeo, que también incluye obligaciones respecto a los ingredientes y la trazabilidad, para ganar seguridad jurídica.

La valoración de Adelta sigue a la publicación de los datos de consumo y venta de tabaco publicados por el Comisionado. Según sus estadísticas, el año pasado el consumo y las ventas de tabaco se mantuvieron bastante estables. Las ventas de las distintas labores (cigarrillos, cigarros, picadura de liar y picadura para pipa) alcanzaron 11.857,9 millones de euros, frente a los 11.904 de 2015. Los cigarrillos siguen siendo de largo la opción más popular, con 10.311,1 millones de euros (10.312,1 en 2015), seguida del tabaco de liar, con 1.000,7 millones (1.030,1 en 2015). Los cigarros puros vendieron por valor de 496,3 millones y la picadura para pipa, 49,8 millones de euros.

Los datos de consumo indican que los españoles fumaron algo menos en 2016. Se vendieron en el mercado legal 2.323,4 millones de cajetillas de 20 unidades, un 0,07% menos que las 2.325 millones del año anterior. Algo más, un 3%, cayó el consumo de tabaco de liar, que pasó de 6.100 toneladas a 5.917,8. Se consumieron 2.201,4 millones de cigarros, un 3,7% menos, y 687,5 toneladas de picadura para pipa, frente a las 693 del año anterior, un 0,8% menos.

Caída del consumo

Si bien los datos de consumo son parecidos a los de 2015, si se amplía el campo de estudio, la caída del hábito de fumar en España es espectacular desde la entrada del nuevo siglo. Atendiendo al consumo de cajetillas de cigarrillos, en el año 2005, justo antes de la entrada en vigor de la ley antitabaco, se vendieron en España 4.634,9 millones de cajetillas. A finales del año siguiente, con un año de vigencia de la ley, el número de cajetillas vendidas bajó a 4.504,8 millones. A finales de 2010, justo antes de que entrase en vigor la reforma de la ley Antitabaco, las ventas habían caído a 3.621,5 millones de cajetillas. Ya con la nueva ley en marcha, en 2011 las ventas se quedaron en 3.015 millones. En 2016, los 2.323,4 millones de cajetillas son casi la mitad de las vendidas en 2005.

Las ventas de la industria de tabaco alcanzaron su techo en 2010. Al final de ese año, con cinco años ya de vigencia de la Ley Antitabaco aprobada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero que entró en vigor el 1 de enero de 2006, se vendió tabaco por valor de casi 13.000 millones de euros. Desde ese año, los ingresos del sector fueron decayendo poco a poco, hasta que en 2014 se quedaron en 11.849,5 millones. En 2015 aumentó ligeramente la recaudación, hasta 11.904 millones, para volver a caer levemente hasta los 11.857,9 de 2016.