El Dow Jones toca los 20.000 puntos por primera vez en la historia

El pasado 6 de enero el índice selectivo estadounidense ya estuvo a punto de superarlos 20.000 puntos. Se quedó a menos de cuatro décimas de la marca. A partir de ese momento, los inversores empezaron a tomarse las cosas con más calma a la espera de que las grandes compañías publicaran sus cuentas. Y ese ha sido el estímulo que ha hecho que hoy, nada más abrirse la sesión se superara la histórica marca. Le bastaban 88 puntos. La jornada la despidió en los 20.068 puntos, tras anotarse una subida del 0,8%.

El índice bursátil más conocido del mundo nació el 26 de mayo de 1896, entonces se basaba en los datos de las dos empresas que lo componían. Actualmente indica la evolución de 30 grandes multinacionales estadounidenses, entre ellas Apple, Microsoft, Wal-Mart, Coca-Cola o Disney. Tardó 76 años en superar los 1.000 puntos. Lo hizo en noviembre de 1972. Durante esas décadas, sus movimientos eran relativamente estables.

Poco a poco las cosas cambiaron. 11 años después, en 1987, superó los 2.000 puntos. Y ahí comenzó a tomar velocidad. Con el crash de 1987 perdió parte del terreno ganado (el llamado lunes negro), pero en 1999, menos de una década después, ya superaba los 10.000 puntos. En mayo de 2013 sobrepasó el hito de los 15.000 puntos y en 2017 ya ha superado la barrera de los 20.000 enteros.

La subida en los últimos 12 meses ha sido importante. En febrero de 2016 marcó el mínimo de este periodo: 15.451 puntos. La remontada ha sido del 30% desde entonces.

El Dow Jones ya rozó el nivel psicológico de los 20.000 enteros hace cinco semanas, cuando se quedó a menos de 25 puntos al cierre de la sesión el 20 de diciembre. Pocos días después, el 6 de enero, casi lo logró. Hasta hoy. Lo único que podía haber hecho descarrilar la remontada era un cambio repentino de percepción. Todo se basa en la esperanza de que Donald Trump sacará adelante las propuestas económicas. Los datos dan sustento al optimismo post-electoral.

El Dow Jones cerró por encima de los 19.000 puntos el pasado 22 de noviembre. La bastó, por tanto, con solo 42 jornadas, el segundo incremento más rápido de 1.000 puntos en la historia del parqué. Pero estos números redondos, en realidad, significan más una marcha que se fijan los operadores del parqué. Lo que está por ver ahora es cuánto tiempo puede sostenerse en este nivel. El Dow Jones cruzó por primera vez los 10.000 puntos mientras se formaba la burbuja tecnológica. Pero le llevó una década reclamarlo y marcar la base para empezar a crecer.

La última remontada, de hecho, se apoya en los valores que más se están beneficiando del entusiasmo generado por la victoria de Trump el 8 de noviembre, que esta semana prometió incentivos a las empresas con un recorte "masivo" de impuestos y "en la regulación". El Dow Jones ganó 1.600 puntos en prácticamente diez semanas. Goldman Sachs contribuyó con una quinta parte del tirón, en una rotación de carteras que fue seguida por la aseguradora UnitedHealth, Caterpillar, IBM, 3M y Chevron.

Los puntos vulnerables

Los más críticos con estas marcas recuerdan, además, que el Dow Jones representa una proporción muy pequeña de las miles de empresas cotizadas. Y, a diferencia del S&P 500 y del Nasdaq, los otros índices representativos de Wall Street, el cálculo que sigue provoca que las empresas con el precio más alto tengan una influencia mayor. Goldman se apreció un 45% desde septiembre.

Si se toma como referencia son los 10.000 puntos de octubre de 2009, el componente que más se apreció fue UnitedHealth, con un incremento del 520%. Le siguen Home Depot, con un alza del 450%, Visa, del 340%, y Apple, del 345%. Los más rezagados son IBM, ExxonMobil, Cisco y Goldman Sachs, con un retorno inferior al 30%. AT&T, Alcoa, HP y Kraft cayeron del índice.

Los analistas más cautos consideran, precisamente, que se necesita un esfuerzo más amplio para que el Dow Jones pueda sostener la remontada superada la marca de los 20.000 puntos. Para ello Donald Trump deberá demostrar, por un lado, que puede cumplir sus promesas como presidente y, por otro, que la Reserva Federal no se ve forzada a acelerar el proceso de subida de tipos de interés.

Pero los inversores pueden verse a estos niveles tentados a recoger beneficios a la espera de que las promesas de Trump se conviertan en acciones. De hecho, la escala se estancó en diciembre y las últimas dos semanas los inversores ya mostraron dudas, hasta el punto de que el Dow Jones perdió el pasado jueves el nivel de los 19.700 puntos por el miedo a las amenazas proteccionistas.