Mutua y Slim se convierten en accionistas de referencia de CaixaBank

Mutua Madrileña e Inbursa, el grupo de empresas del empresario mexicano Carlos Slim, han aprovechado con rapidez la operación por la que ayer CaixaBank sacó al mercado un 9,9% de su capital. El grupo asegurador ha comprado acciones hasta llegar al 2,13% del capital social del banco catalán, con lo que se convierte, según informa en una nota, en el "segundo accionista de referencia del banco tras CriteriaCaixa. Ignacio Garralda, presidente de Mutua, se trata de una "atractiva oportunidad de inversión" por su alta rentabilidad por dividendo y potencial de revalorización a medio y largo plazo.

El grupo financiero Inbursa, controlado por el empresario mexicano Carlos Slim, ha invertido alrededor de 100 millones de euros en la colocación en el mercado de acciones de Caixabank, según fuentes conocedoras de la operación.

Caixabank informó ayer de que en dicha operación, en la que han actuado como entidades colocadoras J.P. Morgan Securities y Morgan Stanley International, habían participado dos inversores institucionales "con vocación de permanencia" por un importe total de aproximadamente 380 millones de euros.

Caixabank anunció ayer que ponía a la venta un 9,9% de su capital social, que tenía en autocartera, para poder hacer frente a la compra del banco portugués BPI, del que ya posee el 45%. Al cierre de la Bolsa de ayer, el paquete que CaixaBank ponía a la venta estaba valorado en 1.372,41 millones de euros. Informó asimismo el banco de que se trataba de una "colocación privada entre inversores cualificados" y de que dos inversores institucionales ya se habían interesado por paquetes que sumaban 380 millones.

Según ha informado Mutua Madrileña en una nota, tras acudir a la colocación de acciones de la entidad financiera, "ha alcanzado el 2,13% del capital social de CaixaBank, lo que representa una inversión de alrededor de 280 millones de euros". La participación "sitúa a la aseguradora como un accionista de referencia del banco tras CriteriaCaixa".

La aseguradora afrontará con fondos propios la operación, que para Garralda supone "una atractiva oportunidad de inversión precisamente en unos momentos en los que la renta fija, tradicional foco de la inversión financiera del sector asegurador, presenta rentabilidades próximas al 0%”, debido a la política de tipos bajos que está aplicando el Banco Central Europeo para estimular la economía y levantar la inflación. Además, para Mutua, la operación se justifica por "la alta rentabilidad por dividendo que ofrece la entidad financiera, en torno actualmente al 6%, y que contribuiría a la cuenta de resultados de la aseguradora con más de 16 millones de euros anuales".

La aseguradora informa también de que su cartera de activos, al final del primer semestre de 2016, ascendía a 6.946 millones de euros, un 2,7% más que al año anterior. Con la compra de nuevas acciones de CaixaBank, la inversión de Mutua en la entidad bancaria pasa a representar el 4% de esos activos.

Mutua destaca la "excelente relación" de ambas empresas tras la compra de Segurcaixa Adeslas en 2011, que aportó buenos datos a la aseguradora y además, valora que "CaixaBank es el grupo financiero líder del mercado español".