Schlumberger compra Cameron en pleno desplome del crudo
La mayor compañía de servicios a las petroleras necesita ganar en eficiencia para responder al recorte del gasto de sus clientes
La persistencia del bajo precio del petróleo está forzando a las grandes multinacionales de la industria a tomar posiciones y establecer nuevas alianzas para fortalecerse. Schlumberger, que ofrece servicios en los campos de extracción de crudo y de gas natural, compra así Cameron International en una operación valorada en 14.800 millones de dólares.
La adquisición se anuncia con el barril de crudo negociándose en Nueva York por debajo de los 40 dólares, en mínimos de hace seis años y medio. Los analistas del sector vienen anticipando desde hace meses que la industria está abocada a consolidarse si se mantiene el valor de la energía tan bajo, en un proceso que recuerda al que se vivió en el sector bancario tras la última crisis financiera.
Hasta ahora la estrategia de aguante de las petroleras pasaba por reducir sus operaciones e inversiones para lograr ahorros y soportar mejor el desplome de precios. Pero este recorte del gasto afectó a la demanda de servicios como el que ofrece Schlumberger. Ante esta situación, adquiere una sociedad que le permitirá unificar los sistemas de prospección y producción, y ganar en eficiencia.
Cameron está especializada en equipamiento para la industria de la energía. Sus títulos han llegado a apreciarse un 45%. Los de Schlumberger, que solo este año lleva anunciados 20.000 despidos, caían un 4,5% a media sesión. Las dos compañías ya crearon hace tres años una sociedad conjunta para hacer prospecciones en aguas profundas. Halliburton, su mayor rival, acordó fusionarse en noviembre con Baker Hughes.
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