¿Por cuánto estarías dispuesto a cambiar de banco?
Muchas veces, por diversas razones, aceptamos que nuestra entidad nos cobre comisiones que suponen un gasto importante
Pereza, falta de tiempo, dejadez, “es mucho papeleo”, costumbrismo o simplemente no pararse a pensar ni conocer el abanico de opciones que hay en cuanto a entidades y productos financieros son algunos de los motivos que los clientes tienen para permanecer en una entidad durante mucho tiempo, incluso sin obtener grandes beneficios o ventajas por ello.
Si echamos la vista atrás y nos paramos a hacer cuentas, es posible que nos demos cuenta de que hayamos pagado una cantidad importante en concepto de comisiones por gestionar nuestras finanzas o por realizar operaciones básicas. Según un informe de FACUA, al año los clientes de entidades financieras pagan hasta 200 euros al año en comisiones bancarias. Cantidad que puede ser suficiente para justificar un cambio de entidad.
Son muchas las alternativas bancarias que ofrecen productos y servicios exentos de las comisiones más básicas que harán que ese dinero que tanto esfuerzo cuesta conseguir no se vea disminuido poco a poco por incómodas comisiones. Por eso lanzamos la pregunta ¿por cuánto estarías dispuesto a cambiar de banco?
Porque según el Instituto Nacional de Estadística, la tasa de ahorro de los hogares del primer trimestre de 2014 resultó negativa, es decir, se situó en el -1,9% de la renta disponible. Por lo que ante una situación en la que el ahorro es según fuentes oficiales difícil, no incurrir y evitar gastos bancarios es un buen camino.
¿Compensa cambiar?
Pasar de pagar comisiones a no pagarlas puede ser la respuesta a tanta pregunta. Compensa desde el bolsillo. Evitar la comisión por administración, mantenimiento, transferencias, ingreso de cheques o tarjetas desde el punto de vista de un cliente con nómina puede ser lo más ventajoso. Un ejemplo de ello es la Cuenta Nómina de ING Direct, en la que no hay compromiso de permanencia y con la que se puede conseguir la devolución del 3% de las compras en Galp o Shell.
Hay ocasiones en las que también compensa no cambiar de banco. Para aquellos a los que los motivos iniciales de este artículo son suficientes para buscar una nueva entidad, existen entidades que ofrecen sus servicios sin la necesidad de hacerlo y que además los ofertan exentos de comisiones como la tarjeta Visa Barclaycard. Su cuota anual es gratuita para siempre si se contrata online, lo que significa que si mantenemos de media la tarjeta 5 años, nos ahorraremos 150 euros durante ese tiempo ya que la cuota sería de 30 euros al año si no se contrata online.
Internet a nuestro favor
Hoy día Internet es una herramienta con la que el 69,8% de los hogares españoles cuenta según revela el INE en su encuesta sobre Equipamiento y Uso de Tecnologías de Información y Comunicación en los Hogares de 2013. También según esta encuesta el 53,8% de la población española de entre 16 y 74 años utiliza Internet a diario. Por lo tanto, el papeleo, los desplazamientos y el tiempo ya no son un impedimento para cambiar de banco. Además las entidades financieras que operan de manera online son capaces de ofrecer productos y servicios en los que las comisiones son parte del pasado.
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