AbbeVie compra la irlandesa Shire

AbbeVie consiguió al final llegar a un acuerdo con Shire para adquirirla. La farmacéutica estadounidense llevaba dos meses y medio persiguiendo a la irlandesa, por la que acabará pagando 54.700 millones de dólares. La operación le permitirá diversificar su cartera de productos y aprovechará para establecer su sede fiscal a Reino Unido, con lo que reducirá de paso a la mitad el pago de impuestos.

La maniobra de AbbeVie, de hecho, generó polémica porque es otro ejemplo de las artimañas a las que recurren las grandes corporaciones para limitar las remesas al Tío Sam. El secretario del Tesoro, Jack Lew, mandó esta misma semana una carta al Congreso en la que urgía medidas para evitar que las empresas usen las fusiones con empresas extranjeras para pagar menos impuestos.

AbbeVie tiene su sede en North Chicago (Illinois). La imposición efectiva ronda en su caso el 22%, que reducirá al 13%. Son movimientos que se están viendo sobre todo en el sector de la salud. Pfizer intentó algo similar con AstraZeneca, pero no prosperó. Mylan lo acaba de lograr con los genéricos de Abott Laboratories, que establecerá en Holanda, y Medtronic con la irlandesa Coviden.

Pero la compra no le va a salir barata a la estadounidense. Tras cuatro rechazos, AbbeVie acaba pagando un 54% más por Shire de lo que valía cuando inicio el intenso cortejo la pasada primavera. Las dos farmacéuticas producen productos muy diferentes, por lo que en este caso tampoco lograran grandes ahorros con la integración de sus negocios mediante las sinergias.

La operación pone además de relieve la fiebre de fusiones que se vive este año a escala global, que según datos de Thomson Reuters ascienden ya a dos billones de dólares. Esa cifra es un 75% mayor que en el mismo periodo de 2013. De ese total, 916.000 millones corresponden a operaciones de más de 5.000 millones. Esta semana Reynolds American compró Lorillard por 26.800 millones.