Los trabajadores a tiempo parcial tendrán pensión, aunque no coticen 15 años

Los asalariados que coticen parcialmente podrán tener una pensión contributiva, aunque no hayan alcanzado 15 años efectivos de cotización. No obstante, será sensiblemente menor. Esta es una de las conclusiones que se desprenden del informe que el Ministerio de Empleo ha enviado a sindicatos y empresarios con las propuestas para reformar el acceso a la pensión de los trabajadores con contratos a tiempo parcial tras una sentencia del Tribunal Constitucional del pasado marzo en la derogaba la regulación vigente hasta el momento.

Aquella sentencia —otra anterior del Tribunal de la Unión Europea y otra posterior del Constitucional— considera que la forma en que se computaba el tiempo cotizado por los empleados a tiempo parcial era discriminatoria y se cebaba especialmente con las mujeres (la gran mayoría de este colectivo). El tribunal europeo incluso subrayaba que en muchos casos los 15 años de cotización efectiva que se exigían era un muro infranqueable de acceso a una pensión contributiva.

La Seguridad Social, en el informe al que ha tenido acceso este diario, propone que no se exijan 15 años de cotización efectiva, sino que este periodo se reduzca en función de la jornada parcial trabajada. Para aplicar esta reducción, el instituto público propone que se calcule lo que llama el coeficiente de proporcionalidad, que sería el resultado de dividir los días de cotización acreditados realmente por el total de días que el trabajador está en alta.

La aplicación de la propuesta de Empleo hubiera supuesto reconocer el derecho a cobrar una pensión a más trabajadores. Como ejemplo, en su documento la Seguridad Social explica que en 2012 rechazó pagar pensión a 2.947 asalariados que habían trabajado a tiempo parcial y que con su propuesta actual, el 39,4% de ellos (1.162) hubieran recibido una respuesta positiva.

Este aumento de beneficiarios se traduciría en un incremento importante de la factura en pensiones. Hay que tener en cuenta que ahora, cuando un trabajador acredita el tiempo mínimo exigido para cobrar una pensión si la prestación a percibir queda por debajo de una pensión mínima, el Estado complementa lo que falta con dinero procedente de impuestos. Es lo que oficialmente se llama “complementos a mínimos” (en 2013 serán de unos 8.000 millones en conjunto).

Para evitar que esto suceda, y también para “salvaguardar la proporcionalidad entre el esfuerzo contributivo \[las cotizaciones pagadas\] y las prestaciones a percibir” y evitar agravios entre quienes han cotizado más y menos, propone la Seguridad Social que se reflexione “sobre el acceso a complementos a mínimos en la forma regulada”. Traducción: hay que buscar la forma de que en estos casos el Estado no tenga que completar hasta el listón de una pensión mínima, y, por tanto, las prestaciones finales serán menores.