Linde cree que el Gobierno decidirá en octubre si pide la prórroga del rescate

El gobernador del Banco de España, Luis María Linde, afirmó este martes en Canadá que el Gobierno decidirá en octubre si solicita una extensión del plazo del rescate europeo para recapitalizar los bancos españoles, tal y como adelantó EL PAÍS. España solo ha utilizado 41.300 millones de euros de la línea de crédito de 100.000 millones que ofreció el Eurogrupo hace un año para reestructurar las entidades con problemas.

El rescate caduca el 31 de diciembre y el BCE y otras instituciones europeas han puesto ya sobre la mesa la opción de extenderlo, a la vista de que los próximos exámenes a la banca y la llegada de la supervisión única, unidos al agravamiento de la crisis, pueden provocar nuevas necesidades de capital. Aunque el Gobierno considera que no necesitará recurrir al dinero europeo, la prórroga del rescate podría servir como red de seguridad para evitar sorpresas desagradables en los mercados.

“El Gobierno tiene que tomar esa decisión, y supongo que será en octubre”, dijo Linde en el marco de la Conferencia Económica de Montreal, incluida en el Foro Económico Internacional de las Américas.

Hará falta más dinero público: el Banco de España circunscribe esas necesidades a las cajas nacionalizadas, pese a que otras fuentes europeas consideran que puede haber alguna que otra sorpresa adicional entre las entidades que se libraron de la nacionalización por escaso margen. “Cuando pensamos en si se precisarán posibles necesidades adicionales de provisiones, estamos hablando de las entidades que están bajo control del Estado”, destacó el gobernador en una entrevista a Bloomberg. En todo caso, “hay que esperar hasta septiembre para ver cómo evoluciona la economía y los resultados de las entidades”, añadió.

Una segunda ayuda más pequeña

Aunque se detecten eventuales necesidades de capital adicional, Linde matizó que “no serán nada comparables con la enorme cantidad que se solicitó el año pasado”, que asciende a 41.300 millones de euros. El Banco de España ha explicado que en este momento pueden hacer falta varios miles de millones en provisiones para las refinanciaciones que ha puesto en marcha la banca. Fuentes del Gobierno aventuran que eso supondría en torno a 2.000 millones en capital adicional, y que tanto el FROB como el Tesoro pueden hacer frente a esos números sin recurrir a la línea de crédito europea. Las refinanciaciones van a ir al alza porque aún quedan varios trimestres de recesión y el paro va a seguir en máximos al menos hasta 2014.

El máximo responsable del Banco de España subrayó también que es importante vender Catalunya Banc y el NCG Banco. Pero no a cualquier precio: “Deben ser bien vendidos”, dijo sin dar más detalles. “El Estado no tiene intención alguna de retener los bancos. No quiere bancos públicos”, remachó, pese a que fuentes del Ministerio de Economía han asegurado con anterioridad que las entidades nacionalizadas pueden ayudar a desatascar el crédito en España.

Los inspectores de la troika —formada por la Comisión, el BCE y el FMI— avisaron la semana pasada de que, aunque el programa para la banca española “está en el buen camino”, persisten “riesgos” debido a la situación económica y a que el ajuste en el sector de la vivienda no ha terminado, y reclamaron extremar la vigilancia. La prórroga que se baraja requeriría probablemente un nuevo memorándum con condiciones, aunque la decisión final correspondería al Eurogrupo. La Comisión coincide con Linde en que será en otoño cuando se dirimirá si hay prórroga o no.