La reinvención de los financieros
Los profesionales buscan salidas de futuro ante la reestructuración del sector
Despidos por doquier. En España y en el resto del mundo. Los profesionales del sector financiero viven su vía crucis particular, cuyo fin, al contrario que en el Calvario, todavía no se entrevé. De hecho, los sindicatos calculan que a lo largo de este año saldrán del mercado laboral otros 20.000 empleados de banca como consecuencia de los expedientes de regulación de empleo (ERE) que han puesto en marcha las entidades nacionales. Se sumarán a los afectados por ajustes anteriores. Según el Banco de España, cerca de 35.000 entre 2008 y 2012, año en que las cajas de ahorros perdieron un 5,6% de su plantilla y los bancos ganaron un 4,5%.
El futuro no pinta bien. Sobre todo para los afectados por los despidos colectivos, especialmente desde el año pasado, cuando la reforma laboral propició no solo un número muy superior de bajas, sino una merma más que cuantiosa (del 37%) en las indemnizaciones percibidas por los que las han sufrido. A los de mayor edad se les plantea un complicado reingreso laboral. Entre otras cosas porque para los puestos de trabajo que se crean, los bancos prefieren a jóvenes. Es su momento. “Vamos a ver empleo joven, porque es más barato y porque las entidades no pueden permitirse la brecha generacional que supone estar sin contratar recién licenciados durante tres o cuatro años. Los bancos harán una segunda ronda de prejubilaciones este año para dejar hueco a la gente joven”, opina Venancio Salcines, presidente de la Corporación Escuela de Finanzas. Y corrobora el director de políticas y servicios globales de recursos humanos de BBVA, Luis Sánchez Navarrete: “Queremos ser el mejor empleador del sector, por eso no hemos bajado la guardia en employer branding y estamos incorporando gente joven para las redes”.
Aunque no sea la madre de todas las ciencias en un mercado escaso de ofertas de empleo, la formación es la gran aliada de los profesionales financieros (y del resto). “Las entidades con gente mejor preparada son las que sobreviven”, afirma Sánchez Navarrete. Por eso las escuelas de negocios especializadas en formar a empleados de banca están reforzando su oferta de másteres con novedosos programas cada vez más especializados.
El poco empleo
La gallega Escuela de Finanzas estrena este año el Máster en Gestión Patrimonial y Finanzas Islámicas, ante el número creciente de fortunas en Oriente Próximo y sus necesidades de inversión, que se está extendiendo por el mundo. El presidente de la organización explica que este máster pionero en España nace porque la banca necesita personal con visión global en vez de vendedores, como tradicionalmente han sido los directores de las sucursales. “Este perfil profesional no es aceptable en otras partes del mundo”, asegura Salcines, que pone como ejemplo los 800 asesores de inversión del Santander suspendidos en Reino Unido para reciclar su formación y adecuarse a la legislación. “La formación de éxito pasa por acreditar los títulos a nivel mundial, por eso a partir de 2013 todos nuestros posgrados se someten a la regulación británica, la más exigente del mundo”, agrega, a la vista de que el empleo del sector se está generando fundamentalmente fuera de las fronteras, en Londres, Dubái, Emiratos Árabes y Singapur.
Escuela de Finanzas, que va a abrir ahora delegación en Madrid y está presente en Colombia, Panamá y Uruguay, dice que desde que ha apostado por las acreditaciones internacionales (especialmente la del británico Chartered Institute for Securities & Investment), su número de alumnos se ha colocado a niveles de 2006. Su máster en finanzas islámicas lleva menos de un mes publicitándose y ha cubierto el 30% de sus 25 plazas. Cuesta 9.100 euros, dura 9 meses y los alumnos son gente joven y personal financiero con temor a ser expulsado de su entidad. Según Salcines, el profesional de las finanzas actual debe tener un alto nivel de inglés, asumir que no va a encontrar un lugar fijo de trabajo y que va a viajar, y contar con una titulación que sea un pasaporte internacional.
Para especializarse, salen másteres en finanzas islámicas y banca responsable
También el Instituto de Estudios Bursátiles (IEB) presume de haber lanzado el mes pasado el primer Máster Global en Banca Responsable, en colaboración con la London School of Economist y el World Savings Banks Institute. Es un programa online impartido en inglés con 20 plazas, para las que se han recibido 600 solicitudes, según Álvaro Martínez-Echevarría, director general del IEB; y un precio de entre 10.000 y 12.800 euros. El directivo asegura que la organización está ganando alumnos (este curso cuenta en sus aulas con el príncipe saudí Sultan Saad Abdulaziz Al Saud, que estudia el máster en finanzas internacionales) de posgrado y perdiendo universitarios. Por eso está ampliando su oferta de másteres más allá de la banca responsable, que es uno de los ámbitos de moda y en desarrollo, como demuestra también la reciente norma creada por AENOR para certificar productos financieros socialmente responsables.
Martínez-Echevarría negocia actualmente con algunas entidades bancarias que están acometiendo despidos colectivos la puesta en marcha de un curso de emprendedores del sector financiero para el personal afectado por esos ERE y ha lanzado un programa junto a la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) de finanzas internacionales para las pymes que quieren internacionalizarse. Y es que, según Jordi Fabregat, director de los programas de finanzas de ESADE, los profesionales del sector encuentran mejor acomodo actualmente en los departamentos financieros de las empresas que en las propias entidades bancarias. Los expulsados de la banca de inversión tendrán que reciclarse e ir a las empresas, añade.
Dentro del sector financiero, señala Arnaud Guerin, responsable de la compañía de recolocación MOA BPI Group, las reducidas posibilidades para los despedidos de seguir trabajando, indica, no están en la banca, sino en las aseguradoras Axa, por ejemplo, está contratando a unos 500 asesores) y en consultoras, fundamentalmente. O creando su propio empleo, pues, como asegura Salcines, muchas entidades están llegando a acuerdos con los directores de oficinas afectados por los ERE para que trabajen como agentes financieros a comisión.
Para el director general del IEB, los nichos de empleo que existen en el sector financiero son la banca privada (Bankinter está incorporando personal al área de banca privada, que quiere reforzar, según María Paramés, directora de personas y comunicación), gobierno corporativo y auditoría. La experiencia del director de los másteres financieros de IE Business School, Ignacio de la Torre, coincide en parte. La banca de inversión, la financiación alternativa y la inclusión financiera (microcréditos) son los contenidos con mayor demanda en máster financiero. De la Torre ve oportunidades para los despedidos del sector bancario, uno de cada cuatro trabajadores, dice, en la creación de plataformas de préstamos y de start-ups.
El responsable del área de finanzas del IE no es partidario de lo que llama especializar la especialización, es decir, cree que la formación que aportan escuelas de negocios como la suya (más generalista, pero con la posibilidad de elegir 80 asignaturas optativas) es más aconsejable. Aunque la realidad indica que la demanda se dispara en programas más específicos.
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