La banca suprimiría el sueldo variable de los directivos si los resultados son malos
Un estudio de PwC revela confusión en las entidades ante las nuevas normativas de salarios
Responder a un cuestionario sin que este tenga repercusiones prácticas puede ofrecer resultados curiosos. El caso del informe La remuneración en el sector financiero español. Regulación y tendencias puede ser uno de ellos después de ver algunas conclusiones. Una de las más reseñables: las entidades bancarias estarían dispuestas a suprimir el salario variable de sus directivos en caso de malos resultados. A pesar de la unanimidad en la respuesta, lo cierto es que tomar esta decisión no les supondría el cierre. Según este estudio, el 93% de los encuestados asegura que la remuneración variable no llega ni a la mitad de sus sueldos completos.
Tanto la regulación europea como la española, que restringe los salarios en entidades con ayudas o nacionalizadas, obliga a que el porcentaje variable de la remuneración de los gestores se ajuste a una serie de riesgos. Mediante diferentes métricas, deben relacionarse factores como las pérdidas previstas, el coste del capital o el de la liquidez. Pero a la hora de establecer una cantidad y asumir la restricción en los sueldos, las entidades se encuentran con problemas ya que solo el 56% tiene claros todos los extremos de la nueva normativa.
Solo el 56% de las entidades encuestadas tiene claros todos los extremos de la nueva normativa
Concretamente dos exigencias de la normativa son las que están menos claras. La primera de ellas es la obligación de pagar a sus ejecutivos al menos la mitad de su sueldo variable con acciones o productos que den constancia de la calidad de la entidad como bonos convertibles o preferentes. Estos últimos se cobran únicamente si la entidad registra beneficios. Tan solo el 37% de los bancos y cajas consultados sabe cómo realizar el pago.
La segunda se refiere a los mecanismos que permiten aplazar el pago de bonus en función de que los riesgos pasen de ser una previsión asumible a una realidad incontrolable. Antes se cobraban íntegros con independencia de los resultados, tanto que se convirtieron en uno de los gérmenes de la crisis financiera. En este caso, solo el 25% de los responsables de remuneración tienen claro cómo llevar a cabo este aspecto. Los cambios se realizan paulatinamente a pesar de que las modificaciones todavía no han finalizado. La Directiva sobre Requerimientos de Capital (CRDIV) puede introducir más novedades.
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