Las dudas sobre la banca impulsan la prima de riesgo a un nuevo máximo anual

El futuro de Bankia, la cuarta entidad financiera española y, por tanto, del conjunto del sector, ha pesado como una losa durante la jornada en los mercados, que no se han aplacado ni siquiera con el anuncio de la entrada del Estado en el capital de su matriz, Banco Financiero y de Ahorro (BFA). A esta presión se ha añadido en el ánimo de los mercados la incertidumbre creada tras las elecciones griegas del pasado domingo, cuyo resultado imposibilita la formación de un Gobierno estable y que podrían incluso obligar a una repetición de los comicios el próximo mes.

El Ibex ha estrenado el día con un leve retroceso ampliado a medida que avanzaba la negociación y al cierre suponía un descenso del 2,77% respecto a su cierre de ayer que lo ha situado en 6.812,7 puntos, que devuelven a este indicador a niveles que no se anotaba desde junio de 2003.

En el mercado de renta fija, al final de la jornada los inversores exigían al bono español a diez años 456 puntos básicos más que al activo de deuda pública alemana equivalente. El rendimiento de ese bono ha superado hoy por primera vez desde el 27 de abril pasado el 6%, umbral preocupante que se acerca a los niveles que provocaron la intervención de Grecia y Portugal. El diferencial había empezado el día en 430 y ha llegado a tocar los 458 puntos básicos durante la sesión, con lo que la prima de riesgo se ha situado en niveles que no registraba desde el pasado noviembre (alcanzó su máximo histórico el 22 de ese mes en 468 puntos básicos).

La prima de riesgo italiana, que suele seguir la evolución de la española aunque se encuentra algunos puntos por debajo, ha marcado hoy un máximo de 414 puntos básicos, tras iniciar en 391, con lo que regresa a registros de hace tres meses. Ha finalizado el día en 402.

Al final de la sesión, el valor con mayores pérdidas ha sido Gamesa, que ha caído un 6,96%, como anticipo de los resultados que anunciará mañana y que los inversores auguran poco estimulantes. Todas las entidades financieras han sufrido la convulsión Bankia que ha llegado a ceder un 7,6% durante el día, aunque al cierre la pérdida se recortaba al 5,84%. Hoy asumirá la presidencia de la entidad José Ignacio Goirigolzarri, que fuera consejero delegado del BBVA hasta 2009, y que ha sido designado por el Gobierno de Mariano Rajoy para capitanear el saneamiento de la entidad hasta el lunes presidida por Rodrigo Rato, y que requerirá una inyección de fondos públicos -se articularán como un préstamo convertible en capital- de entre 7.000 y 10.000 millones de euros.

Las pérdidas que pesan durante toda la jornada sobre el sector financiero se han contagiado a la aseguradora Mapfre, cuya cotización ha bajado un 6,27%. La compañía ha anunciado hoy que cerró el primer trimestre del ejercicio con un beneficio neto de 271,4 millones de euros, lo que supone un descenso del 12,5% con respecto a los 310,1 millones del mismo periodo del ejercicio anterior, debido a la ausencia de resultados extraordinarios y a las menores plusvalías. La aseguradora mantiene desde 1998 una alianza estratégica con Caja Madrid, una de las siete cajas aglutinadas en Bankia, para la comercialización de su productos.

Bankia se veía acompañada en su caída por el resto de los valores bancarios del Ibex: Caixabank (-6,69%), Bankinter (-5,33%), Popular (-4,74%), BBVA (-4,73%), Santander (-4,52%) y Sabadell (4,39%).

Los inversores creen que el rescate de la entidad y la sustitución de su cúpula directiva no serán suficientes para restaurar la confianza en el sistema bancario español, lastrado por los créditos problemáticos —unos 184.000 millones de euros según cálculos del Banco de España— derivados de la orgía inmobiliaria de la pasada década. "La verdadera señal vendrá cuando se detalle de forma creíble cómo se van a sanear los balances de la totalidad del sistema financiero", ha declarado a Bloomberg Ricardo Wehrhahn, socio de la firma de consultoría Roland Berger.

Además de la entrada en el capital de BFA, el próximo viernes el Gobierno anunciará una nueva reforma financiera que, además de regular la salida de activos inmobiliarios fuera del balance de las entidades, impondrá provisiones adicionales para los activos del ladrillo clasificados como sanos aún, que pasarán del 7% que impuso la normativa aprobada el pasado febrero al 30%. Según fuentes anónimas citadas por Bloomberg, ello supondrá dotaciones adicionales por importe de unos 30.000 millones de euros.

Los inversores han acogido también con ventas los resultados trimestrales de Amadeus y Endesa. La primera, tras permanecer en números rojos durante toda la mañana, lograba subir un 0,65% al cierre, mientras la eléctrica se dejaba un 1,36%.

Endesa ganó 621 millones de euros entre enero y marzo, lo que supone un descenso del 7,2% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, debido a la caída del negocio de España y Portugal. Amadeus obtuvo un beneficio ajustado de 167,9 millones de euros en el primer trimestre del año, lo que supone un 22,1% más con respecto al mismo periodo del anterior. La compañía ha precisado que de esta cifra se excluyen el efecto neto de impuestos de la amortización y deterioro del inmovilizado, las variaciones en el valor razonable de los instrumentos financieros y las diferencias de cambio no operativas así como las partidas extraordinarias e interrumpidas, entre ellas la venta de activos y participaciones accionariales y la OPV.

El resto de las Bolsas europeas también han acusado hoy la inestabilidad del sector financiero español y la posibilidad de que Grecia se vea abocada a salir de la zona euro. Londres ha cerrado con un descenso del 0,44%, París ha cedido un 0,2% y Milán un 1,18%. Tan solo Fráncfort ha logrado arrancar a la sesión un avance del 0,47%.

La moneda común refleja la vulnerabilidad del área con una nueva caída frente al dólar y ha llegado a cotizar a 1,2912, nivel que no tocaba desde el pasado enero, pero al final de la negociación en Europa se intercambiaba a 1,2955.

El pesimismo ha cruzado el Atlántico y las cotizaciones en Wall Street, a falta de otros indicadores de referencia en la sesión estadounidense, se anotaban ligeras caídas a media sesión. El Dow Jones cedía un 0,64%, el Standard & Poor's un 0,39% y el Nasdaq un 0,35%.