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La segunda gran caja catalana se bautizará CatalunyaCaixa

El consejo aprueba una fórmula moderna que mantiene la denominación de la mayor de las tres entidades, Caixa Catalunya, Tarragona y Manresa

CatalunyaCaixa. Esta será la nueva tarjeta de presentación comercial de Caixa Catalunya, Tarragona y Manresa, que empezó a operar ya el pasado mes de julio como una única entidad financiera a todos los efectos pero que se mantenía huérfana de marca. La adopción de la recién estrenada identidad corporativa de la caja que dirige Adolf Todó se decidió en la noche de ayer, en el transcurso de un largo consejo de administración ordinario que, durante el actual periodo transitorio hasta la total integración, cuenta con 54 miembros procedentes de las tres cajas. Bajo la marca global CatalunyaCaixa, aparecerá como epígrafe la denominación social de la entidad, que sigue mencionando a Catalunya, Tarragona y Manresa. Hoy está prevista la presentación pública de la marca y el logotipo de la segunda gran caja catalana, con cerca de 81.000 millones de euros de activos.

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Según fuentes próximas al consejo, en la elección han pesado consideraciones como la fuerza de da una marca de una única palabra y también la modernidad que supone la alteración del orden del nombre Caixa Catalunya. La decisión ha sido de lo más difícil de tomar. En un primer momento, la entidad de la Diputación de Barcelona (PSC) había dejado claro que había que crear una marca nueva que visualizará la constitución de una nueva entidad. Y sobre todo, que hiciera más digerible a sus nuevas socias que no se trataba de una absorción, considerando que Catalunya es mucho mayor que Tarragona y sobre todo que Manresa. La supuesta devaluación de la marca debido a las dificultades iniciales para digerir el empacho de créditos relacionados con el ladrillo por parte de Caixa Catalunya e incluso la mención Catalunya de cara a una ulterior expansión fuera de la comunidad catalana fueron otros argumentos que se valoraron.

Las propuestas iniciales de nombres sin relación alguna con el territorio no gustaron a la cúpula de la entidad. Con el paso del tiempo, las tesis defendidas, especialmente por el presidente, Narcís Serra, sobre el sentido de mantener la palabra Catalunya han ido calando, debido a su penetración en el mercado. Los sindicatos veían también bien esta idea. Los representantes de Caixa Manresa han sido los que más resistencia han opuesto, sobre todo después de que su director general, Feliu Formosa, no encontrara encaje profesional en el proyecto, tras haber defendido la fusión a tres bandas.

Con la integración en curso, el dinero del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) en las arcas y la marca a punto de ser lanzada al mercado, la asignatura pendiente de la entidad será ahora el relevo de Narcís Serra en la presidencia, que se decidirá antes de la próxima asamblea de noviembre. En principio, la entidad preferiría que, en el actual contexto de intento de despolitización de las cajas, no le sucediera un presidente de perfil político.

El nuevo logotipo CatalunyaCaixa.
El nuevo logotipo CatalunyaCaixa.
Vista de la nueva imagen corporativa colocada en la sede central de Caixa Tarragona.
Vista de la nueva imagen corporativa colocada en la sede central de Caixa Tarragona.EFE

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