Cándido Méndez admite que tendrán que agilizar el diálogo social

El secretario general de UGT, Cándido Méndez, no interpreta "como una concesión ni tampoco como un elemento de presión" el hecho de que el Gobierno haya aceptado retrasar hasta el 5 de febrero la presentación en Consejo de Ministros de sus propuestas para la reforma del mercado laboral. Méndez, en declaraciones a RNE, considera "lógico y razonable" que el Ejecutivo haya atendido la petición de los agentes sociales para que, antes de abordar el diálogo tripartito sobre la reforma laboral, sindicatos y empresarios puedan despejar primero el marco de la negociación colectiva para 2010 y posiblemente para años sucesivos.

Estoobligará a CC OO, UGT, CEOE y Cepyme "a ser muy ágiles" en la negociación, porque es un asunto que "no se puede prolongar indefinidamente". Para Méndez, que el aplazamiento haya sido de dos semanas y no de tres o de más tiempo es un "tema menor" porque lo importante, dijo, no es el tiempo, sino que haya voluntad. "Si hay voluntad hay tiempo suficiente y yo creo que hay voluntad", ha apuntado.

'No' a una rebaja de cotizaciones a la Seguridad Social

Así, y desde la "prudencia" y aunque no ha querido hablar de "avances", ha destacado que sindicatos y empresarios han alcanzado un diagnóstico común de la situación, lo que les permite ir avanzando en la búsqueda del acuerdo de negociación colectiva. Además, Méndez ha opinado que, a la hora de hacer posible el acuerdo, podría pesar "en el ánimo de la patronal" la experiencia que supuso que en 2009 no hubiera un marco para la negociación colectiva.

En materia de pensiones, Méndez ha afirmado que no aceptaría una rebaja de cotizaciones empresariales a la Seguridad Social "fuera cual fuera" la cuantía que se propusiera, aunque ha precisado que estaría dispuesto a estudiar un recorte "temporal" de cuotas para sectores determinados como manufacturas industriales o los vinculados al sector de la construcción, y muy afectados por la crisis, siempre con el objetivo de mantener el empleo.

Por su parte, el secretario general de CC OO, Ignacio Fernández Toxo, ha celebrado la decisión del Gobierno de retrasar al 5 de febrero la presentación de su propuesta de reforma laboral y se ha mostrado confiado en que la reforma de la negociación colectiva sea una realidad la próxima primavera. En rueda de prensa en Tarragona, Toxo ha manifestado que el 5 de febrero se podría alcanzar un acuerdo "de mínimos" relativo a la subida de los salarios para "asegurar el poder adquisitivo de los trabajadores", que podría situarse en una horquilla del 1-2%.

A partir de este consenso se abrirían las negociaciones respecto a la reforma de la negociación colectiva, que los sindicatos quieren suscribir con las organizaciones empresariales "en tres o cuatro meses", de cara a la próxima primavera. Esta negociación debe plantear, a su juicio, cuestiones encaminadas a la reactivación de la economía y a la salida de la crisis, y entre éstas destaca la reducción de la jornada laboral como alternativa a los Expedientes de Regulación de Empleo, ha explicado Toxo. "Creemos que es una medida eficaz y una buena alternativa al cese completo de la relación entre trabajador y empresarios", ha subrayado el secretario general de CCOO, que ha recordado que en España hay alrededor de 450.000 personas afectadas por expedientes temporales, con el riesgo de convertirse en "extinciones" de los contratos.