Bruselas rebaja su previsión de crecimiento de la eurozona para el tercer trimestre

La Oficina de Estadística Comunitaria (Eurostat) ha confirmado hoy que el Producto Interior Bruto (PIB) de la eurozona correspondiente al primer trimestre subió un 0,6%, respecto al mismo periodo del año anterior. Sin embargo, ha corregido a la baja las previsiones para el tercer trimestre, ensombreciendo la clara recuperación augurada por Bruselas en su último informe trimestral.

Concretamente, Eurostat ha determinado que espera que la economía de los doce miembros de la eurozona, registre un crecimiento intertrimestral de entre el 0,3% y el 07%, tanto en el segundo como en el tercer trimestre. Así, mientras que las previsiones para el periodo abril-junio permanecieron sin cambios respecto a estimaciones previas difundidas, el tercer trimestre ha sido rebajado desde un pronóstico anterior de un rango de crecimiento de entre el 0,4% y 0,8%.

Aunque la Oficina Comunitaria no ha dado motivos para esta rebaja, la Comisión Europea, aunque confirmó recientemente esta recuperación gracias a una mejora de la confianza empresarial, manifestó cierta incertidumbre e "inquietud" debido al repunte de la inflación y al aumento desmesurado del precio del petróleo.

Mantiene el crecimiento en el primer trimestre

Por otro lado, la Oficina comunitaria ha publicado hoy su segunda estimación del PIB del tercer trimestre correspondiente a este área, manteniendo sus anteriores cifras. Así, la economía de la eurozona subió un 0,6% respecto a periodo anterior, al igual que la de la Unión Europea ampliada (UE-25). Durante el cuarto trimestre de 2003, las tasas de crecimiento fueron un 0,4% en la zona euro y un 0,5% en la UE-25. En comparación con el primer trimestre de 2003, el PIB de la zona euro creció un 1,3% mientras que el de la UE-25 lo hizo en un 1,7%.

De entre los Estados miembros, Grecia registró, respecto al trimestre anterior, el crecimiento más acentuado (2,9%), seguido de Lituania (1,4%), Estonia (1,2%), Francia (0,8%), Bélgica, Holanda, Finlandia y el Reino Unido (0,7% cada uno). España se situó en un 0,6%. Las tasas de crecimiento del PIB más débiles fueron las de Chipre y Austria (con un 0,2% cada una).