Más de 900 sucursales bancarias abren el día 1 para facilitar el paso al euro

Las entidades de crédito españolas, a petición del Banco de España, han decidido abrir 925 sucursales el día 1 de enero para facilitar el canje de pesetas por euros. Además, las entidades financieras han garantizado que dos de cada tres cajeros automáticos van a dispensar la nueva moneda común europea tras las 12 campanadas.

Las sucursales bancarias abrirán entre las 11.00 y las 14.00 horas, periodo en el que también estarán abiertas al público la sede central del Banco de España y sus 52 sucursales. El número de oficinas bancarias que abrirá sus puertas el primero de enero representa algo más del 2% del total de la red de sucursales, número que cumple el objetivo mínimo sugerido al sector financiero desde el Banco de España.

El número y ubicación de las agencias bancarias según un comunicado del Banco de España, se ha sido determinado, entre otras razones, en función de la demanda estimada de canje de la nueva moneda. La lista de sucursales abiertas y podrá consultarse en la página web del Banco de España a partir de hoy.

Esta medida, unida a la adaptación el día 1 de un porcentaje elevado de cajeros automáticos, permitirá la obtención de billetes en euros para hacer las primeras compras con el recién estrenado euro. Las monedas están disponibles para el público desde el 15 de diciembre, en el que se pusieron a la venta los euromonederos, formados por 43 monedas por valor de 12,02 euros (2.000 pesetas).

Las ganas de los españoles de hacer, con la entrada del nuevo año, sus primeros pagos en euros ha llevado a muchos de ellos a comprar también el lunes, en el último día del 2001, sus euromonederos, con lo que los bancos han vendido ya un total de 14 millones de estas bolsas con 43 piezas de la nueva moneda.

Despedida oficial de las 12 monedas

Puertas y puentes de las principales capitales de la eurozona son los escenarios elegidos para dar la bienvenida a la moneda la noche del 31 de diciembre. Ambos elementos arquitectónicos figuran en los billetes del euro, elegidos para simbolizar la apertura, la cooperación y la comunicación entre los 12 países participantes de la moneda única.

Desde la Puerta del Sol, en Madrid, a la de Brandeburgo, en Berlín, y con París que festeja al euro sobre el Pont Neuf o Bruselas en el Arco del Cincuentenario, todas las capitales del euro celebran actos especiales para recibir al nuevo año y a la nueva moneda.

Los primeros en festejarlos son los finlandeses y griegos, por la hora de adelanto que tienen sobre la mayoría del resto de los 12 países -Portugal lo hace una hora más tarde-.

En Bruselas, la presidencia belga saliente de turno de la Unión Europea tiene previsto un acto de luz y sonido, con despliegue pirotécnico incluido, en un parque anejo a la Comisión Europea, que se convertirá en una fiesta popular en la que se asegura que los españoles podrán tomar las tradicionales 12 uvas de la suerte.

En Viena, adonde ha viajado el presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, para festejar con los compases de la opereta El Murciélago la llegada de la nueva moneda, se prevé que los euromonederos estén a la venta antes y después de la medianoche.

Los alemanes lloran por la desaparición del marco o festejan el nacimiento del euro junto a la Puerta de Brandeburgo, con una gran fiesta de música y luces, pero también hay actos especiales en Múnich, donde la presidenta del Parlamento Europeo, Nicole Fontaine, asiste a un baile benéfico en la Kuenstlerhaus.

La Puerta del Sol de Madrid une el descenso de la popular bola del reloj de aquella plaza a un espectáculo que incluye un repaso a la historia de la peseta y que concluye con un festival de luz y sonido y fuegos artificiales.

En París, en el puente más antiguo sobre el Sena, el Pont Neuf, se destaca que lo soportan 12 pilares, igual número que el de países que introducen el euro, y que están iluminados de colores azul y amarillo y con las estrellas de la bandera de la Unión.

Los italianos reciben el euro con un gran concierto sinfónico en la plaza del Quirinal, donde se expone una reproducción gigante de la partitura con el fragmento de la Novena Sinfonía de Beethoven que se conoce como el himno de Europa (la Oda a la Alegría).

En la Plaza del Comercio de Lisboa, los portugueses tienen un espectáculo audiovisual dominado por imágenes alusivas a las monedas y billetes del euro y proyectado sobre las fachadas de los ministerios que tienen su sede en ese histórico centro de la ciudad.