Desahuciada una familia chabolista que fue realojada
Una comisión judicial llevó a cabo ayer el desahucio de la familia gitana del poblado chabolista de O Vao, en el municipio pontevedrés de Poio, que en 2008, fue reubicada en la parroquia de Caritel, en Ponte Caldelas (Pontevedra), en medio del rechazo vecinal.La casa no estaba ocupada en el momento del desahucio, por lo que no fue necesaria la intervención de las fuerzas del orden. Sin embargo, la presencia de los medios de comunicación y de un nutrido grupo de agentes de la policía nacional y la Guardia Civil llamó la atención de los vecinos que habían mostrado su rechazo a la permanencia de esta familia en la parroquia, informa Europa Press.
La Subdelegación del Gobierno de Pontevedra estaba advertida de esta intervención y, ante la posibilidad de que se registrasen incidentes, había ordenado un amplio despliegue. Sin embargo, en menos de media hora, se produjo el cambio de la cerradura de la vivienda.
Fue el propio alcalde de Ponte Caldelas, Perfecto Rodríguez, del PP, quien, al carecer de policía local, y ante la posibilidad de un desalojo forzoso de las viviendas de los realojados en Caritel, aconsejó a su homólogo de Poio, el nacionalista Luciano Sobral, que reclamase el auxilio de la Guardia Civil. Al desahucio asistió el concejal de Urbanismo de Poio, Xulio Barreiro. La pasada semana, el portavoz de la familia afectada, Miguel Montoya, había advertido a ese Ayuntamiento de que no tenía una vivienda alternativa y que se planteaba acampar frente a la casa consistorial, lo que no se ha producido hasta ahora. El desahucio de otra familia afectada está previsto para el próximo día 17. El Ayuntamiento de Poio cree que las familias volverán al poblado chabolista de O Vao.
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