Wallander investigará en 'La butxaca'
El sello lanzará en catalán las 10 entregas del comisario de Mankell en solo dos años
Kurt Wallander, el inspector más de carne y hueso de los últimos años, creado por el escritor sueco Henning Mankell, tan depresivo como capaz de actuar con toda contundencia, así en la ficción como en las librerías (roza los 950.000 ejemplares vendidos en España), revivirá por vez primera sus 10 aventuras en catalán y en formato de bolsillo a partir del próximo mes de enero, cuando Edicions 62 y Tusquets lancen la serie completa bajo el sello La butxaca.
En menos de dos años -con un cuidado diseño de biblioteca de autor, un precio que oscilará entre 7,95 y 9,95 euros y una tirada especial de salida de 2.500 ejemplares, notable en las letras catalanas-, La butxaca depositará en las librerías toda la serie prácticamente en el orden en que fue escrita.
La marca económica de Grup 62 cumple cinco años de vida con algún claroscuro
Así, la serie arrancará en enero con Els gossos de Riga y La lleona blanca; en marzo aparecerá Assassins sense rostre (en realidad, la primera del comisario que escribió Mankell, pero la última que Tusquets ha sacado en catalán en tapa dura), y L'home que somreia y La falsa pista lo harán en junio.
La apuesta es fuerte si se piensa que Tusquets, que tiene los derechos de Mankell tanto en catalán como en castellano, ha vendido una media de más de 4.500 ejemplares de cada título de la serie en lengua catalana en el formato clásico (trade), cifras más que notables para la edición en este idioma. L'home inquiet, con 6.600 ejemplares, es el más solicitado por ahora en las librerías. ¿Quién puede comprarlos ahora en catalán, pues, en bolsillo? "Todos aquellos que han leído algún Wallander pero sin orden y los que no lo han leído pero sí lo han hecho con Stieg Larsson y quieren seguir con novela negra nórdica", sostiene la editora de Empúries y responsable última de La butxaca, Eugènia Broggi.
La publicación de la serie de Wallander, tras cuatro años de negociaciones entre el sello económico de Grup 62 y Tusquets, es el inicio de una colaboración entre ambas que podría aportar al formato de bolsillo textos como L'amant, de Marguerite Duras, y el clásico En defensa pròpia, de Jacint Verdaguer. Todo ello en aras de consolidar La butxaca, el primer gran proyecto (por longevo y por número de libros) en formato económico aparecido en lengua catalana, que ha cumplido cinco años de vida y roza ya los 500 títulos editados, aunque se está mostrando como un proyecto con claroscuros.
Así, si bien ha ampliado la red geográfica y de espacios donde antes el libro en catalán era casi inexistente (grandes superficies, principalmente, pero también gasolineras y estaciones de trasporte público), no acaba de alcanzar altas ventas medias propias del producto (la velocidad de crucero es de unos 2.500 ejemplares) ni haciendo labores de sustitución del libro clásico. Ello explica que uno de sus momentos fuertes de venta sea, por ejemplo, la festividad de Sant Jordi.
Un peligro en ciernes será, como le está ocurriendo al formato en países como EE UU y el Reino Unido, la amenaza del libro digital, que parece sustituirlo por la competencia del precio.
En cualquier caso, en Grup 62 creen aún que "la apuesta tiene recorrido". Por ello, se potenciarán estrategias tanto de mercadotecnia por la red (a partir de la creación de clubes de lectura) como estrictamente editoriales; por ahí pasará una mayor producción de series de autor y de ediciones especiales, en tapa dura. De estas ya se ultiman las de Joan Vinyoli, Mercè Rodoreda, Pere Calders y Miquel Martí i Pol, por 13 euros cada una. Si no funcionara, ahí está ya Wallander para intervenir.
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