_
_
_
_
_
La fusión de las cajas vascas

La estabilidad sitúa los excedentes en un segundo plano

El acuerdo contempla condiciones ventajosas para las futuras bajas

Pedro Gorospe

El acuerdo laboral no habla de la cifra de los excedentes que va a generar el proceso de la fusión, no los cuantifica. Ante esa situación, y para evitar la incertidumbre, los sindicatos han preferido amarrar al futuro banco a unas condiciones de estabilidad que le obligan a pactar cualquier salida y a hacerlo de manera no traumática, ni con ERE ni con extinciones de contratos.

Los negociadores, comandados por la mayoría sindical, CCOO, saben que si en otras fusiones similares los excedentes se sitúan en el 10% o 12% de la plantilla, en este caso no va a resultar diferente y podría oscilar entre las 900 o 1.000 personas. Ante esa situación lo que han hecho ha sido fijar un marco que regule las bajas en las mejores condiciones posibles y siempre de común acuerdo.

Bajas incentivadas: 60 días por año trabajado y límite de 45 mensualidades
Más información
Lucha política por decidir el consejo

En el caso de las prejubilaciones, que podría dejar el número total en torno a las 500 al finalizar el proceso, en 2014, el pacto no ha sido rechazado ni siquiera por las centrales críticas con el marco de la negociación colectiva.

"Pese a todo, el acuerdo de prejubilaciones está abierto más incorporaciones", indicaron ayer desde CC OO. "Si hay más gente que quiera sumarse a este tipo de medidas y cumple las condiciones está pactado que lo podrán hacer", aunque creemos que no superará ese número indicaron estas fuentes.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Con anterioridad a la firma del acuerdo laboral entre cajas y sindicatos, desde Kutxa, su presidente, Xabier Iturbe, ya adelantó que los excedentes no iban a constituir un bloqueo insalvable para del acuerdo, habida cuenta de la bolsa de prejubilaciones que se había estimado en las direcciones de Recursos Humanos y que elevaban prácticamente a mil empleados la lista general de bajas en un plazo aproximado de siete a ocho años.

En este clima de entendimiento para cerrar el cuadro de excedentes, y en un deseo compartido de evitar ajustes, el pacto laboral regula numerosas figuras que abren un abanico de posibilidades a la plantilla, en caso de querer dejar la entidad. Además de las bajas incentivadas, que dispondrán de 60 días por año trabajado y un tope de 45 mensualidades, unas condiciones "inmejorables tal y como está la situación económica" para quienes les salgan las cuentas, también han regulado las suspensiones voluntarias de contrato por un tiempo máximo de entre tres y cinco años.

Como compensación, además, quienes la soliciten se llevarán una indemnización equivalente al 25% de su retribución bruta del año inmediatamente anterior, por cada año de suspensión que haya solicitado. Con cuatro años le vendría a corresponder el equivalente a un año completo. A su vez, tendría garantizada la vuelta y la reincorporación aunque ese periodo transcurrido ya no se computaría como antigüedad en sus condiciones.

Los sindicatos estiman que las previsiones adelantadas por Iturbe en el entorno de las mil prejubilaciones a largo plazo pudiera estar la cifra resultante, dentro del marco del acuerdo logrado con los negociadores de las tres entidades financieras, y nunca en base a medidas traumáticas que pudieran derivarse de cualquier tipo de reorganización que afronte la empresa a partir del cierre del acuerdo laboral.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Pedro Gorospe
Corresponsal en el País Vasco cubre la actualidad política, social y económica. Licenciado en Ciencias de la Información por la UPV-EHU, perteneció a las redacciones de la nueva Gaceta del Norte, Deia, Gaur Express y como productor la televisión pública vasca EITB antes de llegar a EL PAÍS. Es autor del libro El inconformismo de Koldo Saratxaga.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_