Juicio a la mujer que envió un paquete bomba a Batlle

"Recibid un fraternal abrazo cargado de rebeldía. ¡Libertad para todos los presos! ¡Abajo los muros de las prisiones! ¡Viva la anarquía". Así termina una carta escrita, supuestamente, el 26 de enero de 2010 en la cárcel barcelonesa de Brians. Se atribuye a Tamara Hernández Heras y aparece en distintas páginas web de apoyo a esta mujer, que el próximo miércoles será juzgada por enviar un paquete bomba al ex responsable de Servicios Penitenciarios de la Generalitat, Albert Batlle, para reclamar la libertad de un preso anarquista, Amadeu Casellas.

El fiscal pide 16 años de cárcel para Hernández por los delitos de asesinato en grado de tentativa (12) y tenencia de explosivos (4). Los hechos se remontan a octubre de 2009. Hernández se dirigió a una oficina de correos de Alcalá de Henares, desde donde envió un paquete dirigido al domicilio profesional de Albert Batlle Bastardas. El paquete fue recibido en la sede de Prisiones y "ante la sospecha de que pudiera contener algún tipo de explosivo", recoge el escrito de acusación, acudieron al lugar los Tedax de los Mossos d'Esquadra, que desactivaron el paquete con una explosión controlada.

La sospecha estaba bien fundada. Los agentes comprobaron que el paquete contenía un artefacto explosivo completo, de fabricación casera e iniciación eléctrica. Además, se activaba por un sistema trampa de obertura de tapa, que contenía "todos los elementos necesarios" para que sus 50 gramos de pólvora explotasen. Según la fiscalía, los efectos de esa explosión "podrían ser diversos, con probabilidad de causar daños y lesiones graves", incluso "la muerte de la persona que abriese el paquete, según la distancia al artefacto".

El fiscal prevé, en todo caso, que la acusada -que pasó un tiempo en prisión provisional y ahora se encuentra en libertad a la espera del juicio- "tenía intención de causar la muerte" del responsable de Prisiones. Batlle fue nombrado secretario de Servicios Penitenciarios del Departamento de Justicia en 2003, con el primer Gobierno tripartito. En enero de este año fue destituido de su cargo. El nuevo director de la Oficina Antifraude de Cataluña (OAC), el magistrado Daniel de Alfonso, anunció el pasado martes su intención de contar con Batlle como subdirector del organismo de lucha contra la corrupción.

La procesada, continúa el fiscal, pertenece al grupo Cruz Negra Anarquista y su actuación se enmarca "dentro de los actos reivindicativos de dicho grupo por la situación penitenciaria del preso Amadeu Casellas". Casellas, también anarquista, lleva 25 años en prisión por protagonizar, durante la Transición, múltiples atracos a entidades bancarias "para financiar las luchas sociales". Desde prisión ha reiterado en diversas ocasiones abusos de los funcionarios y ha protagonizado algunas huelgas de hambre.

"Quiero transmitiros las ganas de seguir luchando. [...] Vuestra solidaridad ha sabido ser más fuerte que sus rejas. Esta carta va dirigida a todas las personas secuestradas en estos centros de exterminio", precisa Hernández en la carta colgada en Internet. La previsible manifestación de esa "solidaridad" durante el juicio, que se celebra el miércoles, ha obligado a los Mossos d'Esquadra a prever un dispositivo de seguridad frente a la Audiencia de Barcelona.