Tras las huellas de Roma

Cuando se le recuerda, la italiana Francesca Agoni, de 18 años, se ríe. Y es que Francesca se siente como en casa en estos días que va a pasar en Santiponce (Sevilla). Participa en el Campo de Trabajo para Jóvenes del yacimiento arqueológico romano de Itálica, cuna de los emperadores Trajano y Adriano. Y eso, reconoce entre risas esta milanesa, es casi como no salir de su país. "Tenemos muchos museos y muchos lugares como este en Italia". Pero allí no hablan español. Y ese es uno de los principales motivos de su viaje a Andalucía. "Una profesora de mi instituto, donde aprendo castellano, me animó a probar esta experiencia. Y estoy contenta", afirma.

Para participar en un campo de trabajo arqueológico no hay por qué ser estudiante de Historia, tener vocación de descubrir ciudades perdidas o ser un apasionado del arte. "Los campamentos están pensados para todo el mundo. Lo que sí queremos es que sean jóvenes implicados en el voluntariado", explica el director del campamento, Francisco Javier Moreno. Después, cada uno tiene sus propias motivaciones.

En la comunidad se ofrecen 16 proyectos para 413 personas de 18 a 25 años

El campamento, que comenzó ayer, está organizado por el Instituto Andaluz de la Juventud, de la Consejería para la Igualdad. Su director, Raúl Perales, destaca que en la comunidad hay 16 proyectos de distintas temáticas desarrollándose este verano, con una inversión de 250.000 euros. "Se han ofertado 413 plazas, de las cuales 170 han sido ocupadas por jóvenes andaluces, 180 por chavales de otras comunidades y 70, de otros países", explica Perales. Los campamentos están dirigidos a personas de entre 18 y 25 años que pagan 72 euros a cambio de alojamiento, manutención y, además del trabajo, de todo tipo de actividades lúdicas. Pero a Santiponce, además de excursiones y concursos, "en los que están invitados a participar todos los vecinos del pueblo", como recuerda María José López, delegada de Juventud del Ayuntamiento, se viene a trabajar. "El proyecto que vamos a desarrollar estas dos semanas es doble. Por un lado estudiaremos la cerámica romana y ayudaremos a catalogar una amplia colección que tenemos. Por otro, retomaremos los estudios del acueducto que surtía a Itálica y que ya se investigó hace 30 años", desgrana el director del yacimiento arqueológico, José Ramón López.

Son estos trabajos los que han atraído al malagueño Javier Fernández, de 25 años y estudiante de Historia. "He trabajado en algunos yacimientos, pero me interesa seguir formándome. Es la primera vez que me apunto a un campamento de este tipo y creo que será una buena experiencia. El ambiente entre la gente está muy bien", dice. Su compañera, la barcelonesa Judith

Monsalve, una veterana de campamentos en Navarra y La Rioja, está de acuerdo. "Es la mejor manera de viajar, haces algo distinto y aprendes", asegura.