Rubalcaba avisa de que ya no sirven las políticas de Aznar

De entrada, una advertencia a Mariano Rajoy. El candidato socialista a la presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, se estrenó ayer en la batalla política enviando a su adversario, el líder del Partido Popular, el aviso de que para solucionar la situación económica ya no sirven las recetas que utilizó el expresidente José María Aznar. "Yendo al 96 no vamos a encontrar las soluciones", afirmó Rubalcaba en una entrevista en la cadena SER, en la que aseguró que el modelo Aznar provocó la burbuja inmobiliaria que ha sido letal en la crisis.

Lo dijo ya por la tarde, en la radio de más audiencia, y después de haber ofrecido una rueda de prensa en la sede socialista de la calle de Ferraz, más oficialista. El candidato comenzaba así a desmarcarse de las posiciones de Rajoy, al que acusó de no haber revelado detalles de su programa y a quien advirtió de que, tarde o temprano, va a tener que explicar cómo piensa redistribuir los recursos para beneficiar a los más desfavorecidos. "La diferencia esencial [entre Rubalcaba y Rajoy] es que yo creo que se debe salir de la crisis sin dejar a nadie atrás", afirmó. Y en el caso del PP, agregó, "la experiencia demuestra lo que demuestra".

"La diferencia es que creo que se debe salir de la crisis sin dejar a nadie atrás"

"Nunca le he pedido al presidente que adelante las elecciones"

El candidato socialista también aprovechó para defenderse de los ataques de quienes lo acusan de no haber asumido responsabilidades tras la implicación en el caso Faisán de tres mandos policiales por el chivatazo a la banda terrorista ETA. "No creo que deba hablar de ETA en la campaña", afirmó Rubalcaba. "Pero si hay que hablar no me voy a cortar, porque todos tenemos una hoja de servicios impecable", agregó en alusión al presidente y al equipo del Ministerio del Interior. El aspirante socialista, que presumió de haber puesto a la banda terrorista "contra las cuerdas", retó a quienes le critican a hablar también de: "Los 770 presos etarras detenidos, de cómo está ETA y de cómo estaba, y de lo que hemos hecho y lo que otros hicieron".

Su intervención de primera hora de la tarde, en Ferraz, discurrió más por la explicación didáctica, como suele hacer el candidato, de lo que será su campaña política. Tras insistir en los cuatro ejes que como un mantra repite desde que fue proclamado por el PSOE el pasado 8 de julio -empleo, crecimiento económico, igualdad de oportunidades y transparencia política-, Rubalcaba se empeñó en difundir que escuchará todas las propuestas. Recordó que el PSOE ha "sabido siempre conectar con una mayoría amplia de ciudadanos" y que su objetivo es tener un proyecto de futuro para España.

También quiso dejar claro que él no ha sido la mano que ha propiciado el adelanto electoral. "Nunca le he pedido al presidente que adelante las elecciones", zanjó. Aunque sí fue una de las personas que consultó Zapatero para madurar la decisión. Por eso, Rubalcaba se rodeó desde por la mañana del equipo electoral a esperar el anuncio. Tuvieron desayuno, almuerzo frugal (jamón serrano para preparar la intervención) y hasta casi cena de trabajo. Y, mientras, el despacho de la cuarta planta de Ferraz, abierto de par en par.