Cultura, bajo mínimos

"Las circunstancias no las escoges tú, te vienen dadas, pero las puedes transformar". Con esta frase del historiador Jaume Vicens Vives describió el consejero Ferran Mascarell la crisis económica actual, una coyuntura que ha llevado a que el presupuesto de su departamento se vea reducido a 302,4 millones de euros en 2011, cifra que fue calificada por el propio consejero de "enormemente e históricamente baja" ante los diputados de la Comisión de Cultura del Parlament.

Mascarell les pidió a todos eficacia, corresponsabilidad, austeridad, modernización de la estructura cultural, precisión de objetivos y autocrítica, además de que sean capaces de realizar un debate sereno que prescinda de "tics conservadores que permitan simplificar la administración y acabar con mecanismos redundantes", en alusión a la ley ómnibus, presente durante todo el encuentro. "Ruego que me ayuden a conseguirlo", les pidió en varias ocasiones, tras destacar que en Cataluña unas 300.000 personas trabajan en el ámbito cultural.

El consejero asegura que el recorte es del 12,6% y la oposición lo eleva al 17,5%

Según explicó, los recortes en su departamento ascienden al 12,6% con respecto a 2010, algo de lo que la oposición discrepa. Pere Bosch, de Esquerra Republicana de Catalunya, aseguró que si la cifra de partida son los 366,4 millones presupuestados, la disminución asciende a un 17,5%.

El ajuste de cinturón hace que se imponga el ahorro. Mascarell explicó que este año se conseguirá disminuir un 11% el gasto, sobre todo a base de reducir las publicaciones (58%), la conservación y mantenimiento de edificios (54%), y las dietas (52%), y de pasar de 111 a 98 altos cargos. También dio las gracias a los responsables del Liceo, el MNAC, la Fundación Tàpies y el Palau por el esfuerzo que representa la reducción de la aportación de la Generalitat, que asciende al 13,2%. Tras exponer los guarismos del recorte, Mascarell repasó algunos de los objetivos de su departamento, algo que fue reprochado por los diputados de la oposición, que le recordaron que los recortes contradicen su mensaje de transformación y modernización. El momento más tenso se vivió tras intervenir Dolors Camats, de ICV, que calificó los presupuestos de "injustos, ineficaces y desleales", y recriminó: "Hoy tocada hablar de números y no de líneas, cosa que el Conca había hecho ya", en referencia al informe que había presentado esta institución el día anterior. Mascarell, enojado, contestó que nadie como él "ha mantenido un compromiso absoluto con la cultura" y que "es el Gobierno de la Generalitat el que se ha de ocupar de la política cultural catalana".

Entre las apuestas prioritarias que Mascarell desgranó están la creación de un cluster de restauración de bienes muebles y otro del sector de la animación, y de un catálogo único de bibliotecas, además de la puesta en marcha de un nuevo plan de lectura en septiembre, un sello de calidad para las librerías y ayudas a la digitalización editorial. En cuanto al cine, aseguró que pronto se aprobará el reglamento que desarrolla la Ley del Cine y que este año se firmará un nuevo plan integral 2011-2015 de apoyo al circo. El consejero reafirmó su voluntad de crear un centro nacional de fotografía y que la Filmoteca abrirá sus puertas en octubre. Además afirmó que "dentro de pocos días" se conocerá el responsable del Auditorio de Barcelona y añadió: "A partir de mañana resolveremos con Xavier Trias el tema de la paralización del Canódromo".

Al final de la sesión, de casi cuatro horas, la comisión rechazó las enmiendas a la totalidad presentadas por la oposición gracias a los ocho votos en contra de CiU y a la abstención de las dos diputadas del PP.