El 15-M suspende una protesta
El movimiento desconvoca por primera vez un acto por la "intimidación de la policía" - La dispersión de actividades tras la acampada diluye la afluencia
El Movimiento 15-M no consiguió ayer movilizar a sus indignados. A las siete de la tarde tan solo media docena de personas aguardaba en la plaza de Neptuno, junto al Congreso de los Diputados, a pesar de que el perfil de Twitter de @acampadasol había convocado pasadas las seis de la tarde una concentración en contra de la aprobación parlamentaria de la reforma de la negociación colectiva que había salido adelante unas horas antes con los votos favorables del PSOE y la abstención del PNV y CiU.
Aunque el tráfico seguía abierto y la policía no había vallado los accesos a la plaza de las Cortes, los antidisturbios exigieron la identificación a todas las personas que se acercaban a Neptuno y cumplían con los tópicos estéticos que se presuponen a los seguidores del Movimiento 15-M como rastas, chicos con el pelo largo o piercings.
"Identificación, por favor", solicitaba un agente de la policía que también apuntó nombres y números de DNI, registró mochilas y amenazó con poner sanciones si el número de reunidos superaba las 21 personas. Apenas media hora después llegó un pequeño grupo vinculado al movimiento y decidió suspender la protesta. "Se desconvoca la concentración en Neptuno debido a la intimidación ejercida por la policía que nos amenaza con una sanción. No tenemos miedo", aseguraba un tuit de acampadasol.
A las amenazas de sanción, que consiguieron ahuyentar a algunos de los indignados que respondieron con su presencia a la llamada de protesta, se sumó también lo precipitado de la convocatoria. "La policía lo ha puesto difícil, pero también es verdad que se ha anunciado con poco margen", afirmaba una joven que permanecía en las inmediaciones de la plaza a pesar de la desconvocatoria "para no ceder a la coacción".
Desde el levantamiento de la acampada el pasado 12 de junio, los actos se han repartido por toda la región. Sentadas frente al Congreso, acampadas temporales en Rivas, marchas multitudinarias en la plaza de Neptuno, asambleas en cada barrio, manifestaciones contra los desahucios en Tetuán, resistencia frente a los derribos en la Cañada Real, respaldo a los detenidos en los juzgados de plaza de Castilla. Una apretada agenda de protestas que dispersa a los indignados por diversos puntos de la Comunidad y que, como se vio ayer, puede jugar en contra del movimiento.
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