La policía actuará con "prudencia y firmeza" y la fiscalía será "contundente"

El fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, advirtió ayer, tras una reunión de fiscales en Valencia, de que cualquier tipo de agresión a cargos públicos es inadmisible. De igual modo, la fiscal superior de Cataluña, Teresa Comte, anunció una política de "tolerancia cero" y de "respuesta contundente" ante los insultos y zarandeos que sufrieron algunos diputados catalanes el pasado miércoles en Barcelona. "La fiscalía da máxima prioridad a la investigación de los hechos", afirmó Comte.

La manifestación convocada por el Movimiento 15-M frente al Parlamento de Cataluña derivó en un griterío a los parlamentarios que acudían a la Cámara. Algunos soportaron insultos, empujones y chillidos; otros 32 tuvieron que acceder a la Cámara en helicóptero, y varias decenas más en furgones policiales. La fiscalía anunció el jueves que investigaría los hechos y ayer, tras la junta de fiscales superiores de toda España en Valencia, Conde-Pumpido y Comte concretaron que aquellos que trataron de impedir la entrada de los diputados al Parlamento se enfrentan a penas de entre tres y cinco años de cárcel.

Conde-Pumpido quiso además señalar la "absoluta distinción" entre el comportamiento de los indignados de Barcelona en general y los "ataques directos a las instituciones" que se registraron el miércoles.

Respecto a las manifestaciones que ha convocado mañana el 15-M en toda España, el vicepresidente del Gobierno y ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, avisó ayer en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de que la policía actuará con prudencia, pero mostrará "firmeza" si "hay alguien que lo quiere hacer mal". Firmeza y prudencia, reiteró, son "los dos pedales" que marcan el trabajo de la Policía Nacional y de la Guardia Civil. Añadió que, en su criterio, las protestas de los indignados no acabarán en "fractura social".