Azkuna pide no hacer el ridículo con el convenio del Guggenheim

Iñaki Azkuna terció en el tema del Museo Guggenheim con dos mensajes muy claros que provocaron los aplausos de quienes le escucharon en el foro nacionalista de la Fundación Sabino Arana. El alcalde de Bilbao, con su lenguaje diáfano, consideró "una chorrada" la polémica abierta tras asegurar el exconsejero Joseba Arregui que este museo "puede andar solo". Quizá hacia él fue la aseveración de Azkuna de que "no hay nada peor que los conversos, son peligrosísimos". Y a su vez, en referencia a "nuestro icono internacional", advirtió del riesgo de hacer "el ridículo" en la negociación del convenio ya que, añadió, "el apoyo de la Fundación Solomon Guggenheim es fundamental".

Pero en clave municipal, Azkuna adelantó su idea de construir 2.000 plazas de aparcamiento en superficie en los cuatro años de la próxima legislatura y de acometer 200 actuaciones en los distritos municipales dentro de un Plan de Barrios 2011-2015, un plazo en el que el Ayuntamiento de Bilbao volverá a endeudarse "pero no para pagar las fiestas" y remodelará la estación del Termibus.

Para Azkuna, "el rigor y la transparencia en la gestión" va a ser fundamental si consigue, después de sus doce años como alcalde, un nuevo mandato, para el que predice "no va a haber muchas alegrías presupuestarias".

Presencia de Bildu

En cuanto a la coalición Bildu, el alcalde jeltzale pronostica "una buena acogida en Bilbao", sinónimo de unos buenos resultados que pueden "desnivelar" la actual correlación de fuerzas en la Corporación de la capital vizcaína "y eso lo saben el PSE y el PP", añadió. A su juicio, "los que votaron masivamente a HB en el año 1999, están esperando esa democratización".

En el transcurso del coloquio, preguntado por la futura Ley Municipal, Azkuna aseguró que esta norma "no debía nacer, porque total para decir lo que dice, no merece la pena". Según detalló, "una Ley Municipal, cuya referencia constante es a la Ley de Bases de Régimen Local, para qué la quiero", se preguntó, antes de admitir que su apuesta es una ley "que le diga que las competencias del ayuntamiento son éstas, con este dinero y si no me dice eso, no merece la pena".