Un edil de IU pide a Lara que destituya a su 'número dos'
La carta abierta está dirigida a Cayo Lara, secretario general de Izquierda Unida. El concejal de San Sebastián de los Reyes Jesús García Contador le reclama por escrito que destituya a su número dos, Miguel Reneses, secretario de Organización Federal. Y lo hace a poco más de un mes de las elecciones regionales y locales. El trasfondo, según quien lo cuente, es una "pataleta" o el "derecho" a cosechar los frutos del trabajo de cuatro años.
Las críticas del sector que encabeza García Contador se producen después de que se hiciera público que el Ayuntamiento de Fuenlabrada ha subvencionado desde 2006 con 100.000 euros a la Fundación Madrileña para el Progreso y el Desarrollo, presidida por Reneses. La primera de las tres subvenciones se aprobó en 2006. Y el Ayuntamiento justificó la misma, que tenía carácter excepcional, por la importancia del proyecto de colaboración cultural de la fundación de Reneses con el municipio cubano de La Habana del Este.
Las dos siguientes subvenciones son de 2008 y 2010. Según las actas de la junta de gobierno local, contaron con el voto favorable de la edil de IU Teresa Fernández, pareja de Reneses. Ella señaló que se había ausentado y que las actas no lo recogieron por un error de transcripción. El propio Reneses, que asegura que ya ha enviado todo el dinero comprometido a Cuba, niega que la fundación que preside pertenezca a IU, pese a que las sedes de la fundación y del partido del municipio coinciden en un mismo local. De los cerca de 100.000 euros recibidos, unos 40.000 tenían como destino la isla caribeña.
Relevo en octubre
Ese es el penúltimo episodio de un desencuentro que ayer terminó con la apertura de un expediente de expulsión para García Contador por parte de la Comisión Ejecutiva Regional de IU "por agredir la imagen" de la formación. El origen de todo, y ahí coinciden ambas partes, es que el edil y coordinador local fue relevado en octubre para futuras elecciones. IU defiende que se hizo porque la asamblea local funcionaba de forma irregular y se recibieron quejas de militantes. García Contador aseguraba ayer que el motivo real es que el partido al que aún pertenece tiene buenas expectativas para las próximas elecciones en el municipio y se decidió un desembarco de gente nueva "porque IU se ha convertido en un sistema de mantenimiento de puestos de trabajo".
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