Gallardón acepta ser socio del futuro Canal que Aguirre quiere privatizar

Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz-Gallardón han desatascado el principal impedimento que tenía la futura privatización del Canal de Isabel II. El Ayuntamiento de Madrid no solo no romperá el convenio que permite al Canal gestionar el agua de la capital, como había amenazado, sino que ha aceptado formar parte del accionariado de la futura compañía que se creará con la privatización de la empresa de aguas.

Este acercamiento, confirmado ayer por Aguirre y Gallardón, permitirá la firma en breve de dos convenios entre el Canal de Isabel II y el Ayuntamiento de Madrid. Uno supone el traspaso al Canal de la red de distribución del agua reciclada y el otro, la entrada del Consistorio en el futuro Canal privatizado.

El Ayuntamiento de la capital tendrá un 10% de la empresa y de los beneficios

Esperanza Aguirre anunció la privatización del 49% del Canal en el debate del estado de la región de 2008. La operación quedó bloqueada cuando los ayuntamientos gobernados por los socialistas y, más aún, el de la capital, liderado por Gallardón, amagaron con romper los convenios por los que cedieron al Canal la gestión de sus servicios de saneamiento. Además, la crisis llevó a la Comunidad de Madrid, que controla la empresa de aguas, a posponer la salida a Bolsa a un mejor momento económico.

Ahora, para desbloquear esta situación, el Canal ha ofrecido a los municipios el 20% de la participación de la futura empresa que controlará la gestión del patrimonio del Canal. De ella, el 10% corresponderá solo al Ayuntamiento de Madrid, porque tiene la mitad de la población de la región, pero también porque la gestión del agua de la capital genera más volumen de negocio para el Canal que la de otros ayuntamientos. "En una ciudad compacta es más barato y eficiente", justifica el concejal de Hacienda Juan Bravo.

El convenio que han negociado Aguirre y Gallardón, y que aún no ha sido rubricado, permite a este mantener un 10% de participación de la futura empresa, por lo que tendrá la misma proporción de los dividendos. El Canal tiene unos beneficios anuales de unos 100 millones de euros.

Hasta ahora la distribución del agua no tenía una contraprestación para el Ayuntamiento de Madrid, que cedía al Canal su red, porque los beneficios se reinvertían para mejorar el abastecimiento del agua. Una vez que se produjera la entrada de capital privado, explica Bravo, el Ayuntamiento no estaba dispuesto a que se generaran dividendos para las empresas privadas. De ahí que, una vez acordada su participación económica, se haya desbloqueado la situación.

Además, el Gobierno regional permitirá a Gallardón la opción de retener ese 10% de acciones y ser un socio de referencia del Canal o vender un porcentaje y, por tanto, obtener ingresos adicionales. El concejal de Hacienda explicó que el compromiso es que el Ayuntamiento retendrá siempre un mínimo del 3% de las acciones.

Esas mismas condiciones se van a ofrecer al resto de ayuntamientos, según una portavoz del Gobierno regional, en función de su tamaño y población. El porcentaje mínimo que cada uno deberá retener es una de las cuestiones a negociar. De ahí que la privatización del Canal todavía no sea inminente, pues debe cerrarse un convenio con cada municipio. La posición mantenida por los ayuntamientos socialistas hace prever que no se sumen a la operación.

El segundo convenio que firmará el Canal con el Ayuntamiento permitirá a la empresa pública hacerse con la red de distribución de agua reutilizada de la capital durante 50 años, a cambio de un canon de 189 millones a pagar entre este año y el próximo, que irá a las arcas municipales. El agua utilizada, que procede de las depuradoras de la capital, podrá ser vendida por el Canal para riego de parques, jardines o campos de golf y baldeo de calles. "La ventaja para el Canal es que se queda con toda la infraestructura del Ayuntamiento, sin tener que hacerla nueva, para llevar el agua reutilizada a otros municipios, y va a poder cobrar por ese agua", explicaron desde el Canal.