El Consell no consigue recuperar los estudios de la Ciudad de la Luz

El juzgado de Instrucción número tres de Alicante ha desestimado la petición de la Generalitat para recuperar la posesión de los estudios cinematográficos de Ciudad de la Luz en Alicante hasta que no se resuelva el pleito que mantiene con la concesionaria que explota las instalaciones, la empresa Aguamarga Gestión de Estudios.

El Consell, que decidió el pasado mes de octubre romper unilateralmente el contrato con la firma que explota los estudios, había solicitado como medida cautelar que Aguamarga devolviese la posesión de la propiedad a Ciudad de la Luz.

En su resolución, el juzgado número tres de Alicante deniega al Consell las medidas cautelares y acuerda nombrar un administrador judicial para coordinar la relación entre la empresa del Consell, Ciudad de la Luz, y la gestora del complejo cinematográfico, Aguamarga. El administrador judicial dará cuenta mensualmente a la titular del juzgado de la relación entre las partes enfrentadas.

En su auto, el juez impone a la empresa de la Generalitat una fianza de 38.000 euros por los perjuicios que se pudieran ocasionar. Contra esta resolución, las partes pueden interponer recurso, aunque la decisión judicial es ejecutiva.

El Consell, a través de la empresa pública Ciudad de la Luz, y la concesionaria Aguamarga están enfrentados desde hace meses. Ciudad de la Luz anunció a mediados del año pasado la ruptura unilateral del contrato, pese a que la concesión de los estudios a Aguamarga está firmada hasta 2014, por considerar que la mala gestión estaba perjudicando el proyecto.

Un extremo que niega Aguamarga que considera que Ciudad de la Luz ha intentado provocar su deterioro con retrasos continuos en los pagos fijados. acordados.La decisión del juzgado supone un revés para las pretensiones del Consell, cuyo objetivo era asumir el control de los estudios cinematográficos. Según explicó el vicepresidente económico del Gobierno valenciano, Gerardo Camps, de quien depende la empresa pública Ciudad de la Luz, la intención inicial es -una vez que se logre rescindir el contrato con Aguamarga- asumir la gestión de los estudios mientras se prepara un nuevo concurso para adjudicar la explotación del complejo de cine alicantino.

Sin embargo, el contrato existente con Aguamarga, que se prolonga hasta el año 2014, impide en la práctica la rescisión unilateral como quiere Ciudad de la Luz. Los litigios, sin embargo, no acaban en el pleito que se dirime en el juzgado número 3 de Alicante. Aguamarga Gestión de Estudios tiene interpuesta una demanda en el juzgado de instrucción número siete de la misma ciudad por las cantidades que le adeuda Ciudad de la Luz.

Fuentes jurídicas indicaron ayer que, casi con toda seguridad, ambas causas confluirán finalmente en un único juzgado.

La ruptura de Ciudad de la Luz con Aguamarga se produjo el año pasado tras entrar un nuevo equipo de gestión en la concesionaria, que ha presentado un nuevo plan de negocio para garantizar un mayor grado de ocupación de los estudios. La decisión unilateral de Ciudad de la Luz llevó, incluso, a su directora general, Elsa Martínez, a comunicar a los clientes y proveedores de Aguamarga que se había rescindido la relación con la concesionaria de los estudios cinematográficos con fecha del pasado 31 de diciembre. Comunicaciones en las que Ciudad de la Luz advirtió que no se haría responsable de los compromisos que se pudiesen alcanzar con Aguamarga más allá de la citada fecha. A fecha de hoy, la concesionaria sigue manteniendo su actividad en los estudios.

Fuentes del sector indicaron que, pese a las discrepancias entre Ciudad de la Luz y Aguamarga, uno de los principales problemas de gestión del complejo cinematográfico es la política de incentivos que la Generalitat gestiona a través del Instituto Valenciano de Cinematografía. Unas subvenciones, se queja el sector, que se destinan mayoritariamente a unas pocas producciones con poco grado de ocupación de los estudios.