Domesticación digital
En 1999, John Kricfalusi, padre de los irreverentes Ren y Stimpy, rescató a los legendarios Yogui y Boo Boo del catálogo Hanna-Barbera en dos cortometrajes -A Day in the Life of Ranger Smith y Boo Boo Runs Wild- que revisaban la memoria generacional sirviéndose del acerado humor de la nueva animación adulta. Tres años después, el escritor James Gunn firmaba el primero de sus dos guiones para las películas de imagen real de Scooby Doo: una desarticulación de la nostalgia a través del humor pop y sofisticadamente idiota.
Segundo largometraje de Eric Brevig, técnico de efectos especiales que debutó en la dirección con Viaje al centro de la Tierra (2008), El oso Yogui no pierde el tiempo en este tipo de sutilezas: hincha de tridimensionalidad lo que antes era económica elocuencia en dos dimensiones e infantiliza lo que, sin duda, en tiempos no es que tuviera más gracia: es que tenía gracia... sustentada en un palpable conocimiento de las leyes de la comedia televisiva.
EL OSO YOGUI
Dirección: Eric Brevig. Intérpretes: Anna Faris, Tom Cavanagh,
T. J. Miller, Andrew Daly.
Género: comedia. EE UU, 2010. Duración: 80 minutos.
Babelia
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