Tabakalera mantendrá en su nuevo plan los principios de su proyecto original

Diciembre se presenta como el mes clave para que Tabakalera dé las últimas pinceladas a su replanteamiento, que presumiblemente resultará más reducido de lo que en un principio se indicó. Antes de las Navidades, el consejo de administración del Centro Internacional de Cultura Contemporánea, que integran el Gobierno vasco, la Diputación guipuzcoana y el Ayuntamiento donostiarra, se reunirá para alcanzar un acuerdo que fijará las inversiones que asumirá cada parte y definirá los usos que acogerá el edificio de mayor tamaño de San Sebastián. "En diciembre llegaremos a un acuerdo para Tabakalera", confirma a este periódico el viceconsejero de Cultura, Antonio Rivera.

Los pilares del proyecto serán los mismos que se fijaron en 2008 y que se frenaron el pasado 17 de mayo, cuando el alcalde donostiarra, Odón Elorza, pidió una moratoria en el comienzo de las obras. Es decir, Tabakalera integrará a la unidad de cine de Donostia Kultura y al centro de arte Arteleku como gran laboratorio de cultura visual. El consistorio asegura que se mantiene además la voluntad de trasladar las sedes de la Filmoteca Vasca y el Instituto Etxepare a la antigua fábrica de tabacos.

Tras el acuerdo, la principal tarea será explicar la iniciativa a los ciudadanos

La labor realizada a lo largo de estos meses ha girado en torno a la consecución de nuevos socios y nuevos usos que permitan una cierta autofinanciación que no dependa de las tres instituciones citadas. En este punto, y para dotar al centro de proyección internacional, se integra la propuesta que Elorza transmitió al lehendakari, Patxi López, de incorporar a Tabakalera una Escuela Superior de Medios, que sería gestionada por Educación, para aprovechar el campo que los avances del mundo audiovisual ofrece. Con ello se quiere lograr obtener un rédito en las matrículas. A día de hoy, los videojuegos o el 3D configuran un mercado con unos niveles de facturación muy superiores a la suma de los nichos de negocio tradicionales de la música y el cine. "Tabakalera haría muy bien en albergar un centro de audiovisuales. Si no puede ser ese centro, igual acaba siendo otra cosa", sostiene Rivera.

El desembolso estimado inicialmente para los trabajos ascendía a 75 millones de euros, mientras que el gasto corriente de Tabakalera se fijaba en otros 15 millones. La reconversión se antoja inevitable, por lo que la principal reducción se aplicará a la inversión institucional anual, que quedará en unos tres millones de euros por cada parte. El acuerdo alcanzado en el Congreso entre el PNV y el PSOE sobre los Presupuestos Generales del Estado incluyó una partida por otros siete millones que aligerarán el coste de las obras. Fuentes municipales donostiarras apuntan: "Los primeros años son los que más nos preocupan por nuestra capacidad de inversión".

Una vez cerrado el acuerdo en torno a la reconversión, la principal tarea consistirá en realizar un esfuerzo paralelo para comunicar todo el proyecto a los ciudadanos. "Hasta ahora, nos hemos movido en ideas. Cuando lleguemos a los acuerdos, tenemos que saber explicarlo y llevarlo a efectos prácticos", aseveran dichas fuentes. Y es que la controversia generada en torno a este centro es la consecuencia lógica de una idea cuyo contenido no es tan fácil de asimilar como el de un museo al uso.