"No nos debemos comparar con Irlanda"

Entre España e Irlanda hay un abismo. Lo afirma José Manuel Campa, número dos del Ministerio de Economía, el día en que los mercados financieros parecen haber decidido que España es su próxima presa, tras Grecia e Irlanda y seguramente también Portugal.

Pregunta. Los mercados meten a España en el mismo saco que Irlanda. ¿No es para echarse a temblar?

Respuesta. Lo que hay son turbulencias de corto plazo, que se pasarán. No hay que sobrerreaccionar ante lo ocurrido estos días, sino mantener las líneas muy claras de lo que debemos hacer. Y al respecto tenemos pocas dudas. Para ello contamos con el apoyo de los organismos internacionales.

P. Aunque la tempestad amaine tiene consecuencias inmediatas, como que la deuda se encarece, como lo sucedido con la subasta del Tesoro. ¿No puede hacer esto un daño grave, que se retroalimente?

Las dudas sobre el ajuste de Irlanda y la crisis política arrasan los mercados

R. Hemos colocado la emisión de hoy [por ayer], que era muy pequeña, sin problema, aunque es verdad que más cara. Pero lo importante es que tenemos un plan de financiación de la deuda pública a largo plazo, precisamente para que pequeñas turbulencias no interfieran en el coste total. Es un plan previsible, lo anunciamos en enero, consistente con las necesidades que tenemos y que estamos cumpliendo con holgura.

P. Hay dudas de que lo que se está haciendo en materia de reformas sea suficiente y no solo lo transmiten los inversores, también el Banco de España parece que está en esa línea.

R. No creo que los mercados tengan dudas sobre que lo que estamos haciendo sea suficiente. Lo que ocurre es que hay mucha volatilidad a corto plazo, vinculada a situaciones excepcionales, con la primera intervención del fondo de rescate europeo en marcha para Irlanda. Comparemos la situación en la economía española que había en octubre y la de ahora. Si entonces teníamos una credibilidad determinada, ahora no hay motivo para que esa credibilidad se haya deteriorado.

P. ¿Por qué nos castigan tanto entonces? ¿Qué nos asemeja a Irlanda?

R. No es cuestión de compararnos con Irlanda ni con nadie. Hay que decir cuál es la situación propia. Y esta es la de un país con un bajo nivel de deuda pública, que está en un proceso de consolidación fiscal que está cumpliendo y va a cumplir, que acaba de aprobar una reforma laboral y de las cajas de ahorros y que tiene pendiente una reforma de las pensiones públicas y de la negociación colectiva que también va a sacar adelante. Sin duda, nos separa un abismo de Irlanda.

P. Se ha puesto en duda también el euro. ¿Cree que está en peligro?

R. En absoluto, no hay que prestar mucha atención a estos malos augurios. El euro no está en riesgo. Todo lo contrario. La zona euro está sabiendo reaccionar ante los problemas y eso es un valor positivo.