Cornellà deberá indemnizar a un menor que se lesionó con un petardo

Un petardo tirado en medio de un parque dejó sin varios dedos de una mano a un adolescente de 13 años en el parque Can Mercader de Cornellà. El suceso ocurrió durante una excursión escolar en junio de 2001. El parque había acogido un espectáculo pirotécnico y alguien olvidó el artefacto. Nueve años después, el menor es ya un joven de 22 años y recibirá una compensación por aquel accidente: el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña ha condenado al Ayuntamiento y a la Generalitat a pagarle 47.115 euros por las lesiones que sufrió.

Días antes del suceso, Cornellà cerró su fiesta mayor con una celebración de fuegos artificiales en Can Mercader. Allí quedaron petardos de uso profesional sin explosionar. La víctima, alumno del instituto Esteve Terrades, manipuló el petardo con un mechero y el artefacto explotó. El menor perdió varios dedos y sufrió heridas en oídos, brazos y cara.

Según la sentencia, el Ayuntamiento (que asumirá el 70% de la indemnización) incumplió su obligación de limpiar e inspeccionar la zona para eliminar riesgos. El tribunal añade que el centro educativo, de titularidad pública, descuidó la vigilancia de los niños.