Venezuela pide la detención de un testigo en el 'caso ETA-FARC'

Venezuela ha pasado al contraataque. La fiscalía del Gobierno de Hugo Chávez ha emitido dos comunicados relacionados con los procesos que se siguen en España por la supuesta relación entre las FARC, ETA y el Gobierno venezolano. Los medios de comunicación oficialistas han empezado a publicar reportajes defendiendo al Ejecutivo de Chávez de cualquier vinculación con la banda terrorista y acusando a "la derecha española" de pretender la ruptura de relaciones entre ambos países.

Por un lado está la actuación de la fiscalía venezolana. En uno de sus comunicados del lunes informaba de que ha solicitado a Interpol que emita una alerta roja -que ordena la detención en cualquier país- sobre Néstor González González, un general exiliado del Ejército venezolano que participó en el intento de golpe de Estado contra Chávez del año 2002 y que está citado para declarar en la Audiencia Nacional sobre los vínculos entre ETA, las FARC y el Gobierno venezolano el próximo 15 de noviembre.

El juez Velasco pidió en septiembre la comparecencia de Néstor González

Medios venezolanos acusan a "la derecha española" de involucrar a Chávez

La Plataforma Democrática de Venezuela en Madrid, que ejerce la acusación popular en este proceso junto a la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), fue quien propuso la comparecencia de González junto a la de Diego Arria, embajador de Venezuela ante la ONU entre 1991 y 1994. "González ha sido jefe del comando de operaciones número uno de las Fuerzas Armadas de Venezuela, trabajaba justo en la frontera y tiene mucha información sobre los campamentos de entrenamiento de la guerrilla", señala el representante de la plataforma, William Cárdenas, que sostiene que "el Gobierno de Chávez teme su declaración y quiere impedirla".

González vive en estos momentos exiliado en algún lugar de Centroamérica, por lo que tendría que viajar a Madrid para comparecer ante el juez Eloy Velasco, instructor del caso. Si Interpol emite finalmente la alerta roja sobre el ex general, en principio las autoridades españolas tendrían que proceder a su detención. "Hay que ver primero lo que hace Interpol, pero su intención sigue siendo comparecer ante la Audiencia Nacional", asegura Cárdenas. "Él está a disposición de los tribunales españoles.

El momento en el que se pide a Interpol que decrete la alerta roja sobre González no es casual. El 31 de julio de 2006 fue acordada una "orden de aprehensión" contra él a petición de un tribunal de Caracas, acusado de rebelión civil por el intento de acabar con el Gobierno de Chávez. Pero ha sido cuatro años más tarde cuando se ha llevado a cabo la petición de orden de detención internacional, precisamente días después de que se haya publicado que el ex general comparecerá dentro de un mes en la Audiencia Nacional.

La otra decisión de la fiscalía se refiere a Arturo Cubillas, antiguo miembro de ETA refugiado en Venezuela desde hace 20 años y funcionario del Ejecutivo de Hugo Chávez al que los dos presuntos etarras detenidos la semana pasada, Xabier Atristrain y Juan Carlos Besance, involucraron en operaciones de adiestramiento en manejo de armas.

Cubillas ya estaba procesado por el juez Eloy Velasco por su presunta relación con ETA y las FARC. Desde el pasado mes de marzo pesa sobre él una orden de detención internacional, pero las autoridades venezolanas no la han ejecutado. Ahora Cubillas -con nacionalidad venezolana y que por tanto no va a ser extraditado a España- ha pedido a la fiscalía que inicie una investigación sobre los hechos que se le imputan. Ya hay asignado un fiscal, Richard Montesinos. Cubillas ha solicitado también que se estudie si los dos etarras que lo involucraron han podido ser objeto de torturas durante la declaración ante la Guardia Civil.

Los medios venezolanos se han hecho eco también del caso ETA-FARC-Venezuela para defender a su Gobierno. La televisión estatal, VTV, emitió ayer una entrevista de TeleSur con Xabier Arruti, antiguo miembro de ETA refugiado en Venezuela desde 1989, en la que asegura que la alegada relación entre las FARC, ETA y el Gobierno de Chávez solo busca "criminalizar" a éste para lograr una "ruptura de las relaciones internacionales" entre España y Venezuela. "No hay ni una familia que se haya librado de que alguno de sus miembros haya sido detenido y estigmatizado como etarra", señala Arruti en el reportaje, en el que la periodista insiste en las acusaciones de tortura hacia los cuerpos de seguridad españoles. El movimiento oficialista Periodismo Necesario emitió un comunicado de apoyo a la mujer de Arturo Cubillas, Goizeder Odriozola, denunciando un "acoso mediático" por parte de "medios opositores y la derecha española".