Un Ferrol "concienciado" revive sus viejas batallas
Astilleros cerrados, el puerto exterior paralizado y los polígonos industriales de Ferrol, Narón, Fene y As Pontes completamente desiertos. Es la estampa que dejó ayer la huelga en la ciudad naval. Pocos incidentes en una jornada marcada por el respaldo masivo a la protesta en las empresas, comercios y hostelería (80%), y más bien escasa en la función pública. 10.000 personas salieron a la calle en dos manifestaciones contra la reforma laboral de la mano de UGT y CC OO, en una convocatoria, y la CIG, en otra. Aunque los tres sindicatos compartieron piquetes.
Las protestas arrancaron de madrugada. Medio millar de sindicalistas insomnes bloquearon durante toda la noche la recogida de basura, sellaron con silicona las cerraduras de varios locales e instituciones públicas, y montaron una veintena de barricadas en los accesos a los principales centros de trabajo de la comarca. Cortaron las carreteras de entrada a los polígonos de A Gándara, As Lagoas y Río do Pozo, en Narón; Vilar do Colo (Fene) y Os Airíos y Penapurreira, en As Pontes. También bloquearon los viales en Catabois, Xuvia, el puente de As Pías y la AG-64 entre Ferrol y Vilalba.
Dos personas fueron detenidas tras un tenso enfrentamiento con la policía en la estación de autobuses de Ferrol a las 6.30 horas, con varios contenedores y neumáticos en llamas. Los dos jóvenes, militantes de la CIG, prestaron declaración en la comisaría y quedaron en libertad poco después. Un amplio piquete apostado a la puerta de los astilleros de la ría bloqueó la entrada y salida de la factoría naval. Cerraron sus puertas las grandes fábricas de Pull&Bear, Cándido Hermida o Megasa y, tras una negociación, también cerró (por primera vez) el hipermercado Alcampo.
Como en los ochenta
La marcha de UGT y CC OO congregó a unas seis mil personas en la plaza de Armas, bajo una lluvia intensa. "Ganamos la huelga", clamaron sus secretarios comarcales, César Fraga y Xulio Abelleira. Media hora después, la CIG congregaba a unas 4.000 personas en el Cantón. Se sumaron alcaldes y responsables del BNG en la comarca. "No veía esta implicación desde las reconversiones navales de los ochenta", comentó Xaime Bello, ex alcalde ferrolano. "Fue un éxito de participación y concienciación", destacó el responsable comarcal de la CIG, Xesús Pintos.
El Ayuntamiento de Narón secundó la huelga y el consistorio de As Pontes amaneció con la cerradura sellada. Incluso la misa de las Angustias fue desalojada por miembros de la CNT.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.