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Ortiz, al ganar la adjudicación: "Se ha hecho un trabajo bien hecho"

El jefe de la Diputación de Alicante, Ripoll, promovió el reparto de la contrata

"Es para felicitarnos, se ha hecho un trabajo bien hecho", exclamaba por teléfono un eufórico Enrique Ortiz el 3 de enero de 2008, al enterarse de que la junta de gobierno del Plan Zonal de Residuos de la Zona XVII había adjudicado a su empresa Cespa-Ortiz la explotación durante 20 años de la recogida y tratamiento de residuos por unos 360 millones de euros. Ortiz hablaba con Rafael Gregori, que había estado trabajando para que otro empresario de la comarca de la Vega Baja, Ángel Fenoll, lograra ese contrato. "Entonces qué me debes, una buena invitación, ¡eh!", le contestaba Gregori antes de comentar la noticia con tres personas diferentes "adoptando un matiz distinto según se trate", puntualiza un informe policial del caso Brugal.

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Pocos meses después, coincidían en la Feria de Abril de Sevilla el presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, del PP, y el empresario Enrique Ortiz, con sus respectivas esposas. Fue el empresario el que se hizo cargo de la invitación en la que, entre otros, participó, también acompañado por su esposa, Rafael Gregori, intermediario fundamental en la trama de corrupción. La policía, que hacía más de un año que venía investigando el hilo de la corrupción relacionada con la adjudicación de una planta de tratamiento de basuras en la comarca de la Vega Baja, seguía sus pasos, les fotografíaba y grababa las conversaciones. Gregori comentó a uno de sus interlocutores "la eficacia y productividad de sus gestiones tendentes al acercamiento de ambos".

Según la policía, se trataba de la primera de una serie de contraprestaciones que el adjudicatario de la planta de basuras ofreció a Ripoll. Unas contraprestaciones que se concretaron en vacaciones a bordo del yate Elena del empresario y que culminarían, como "principal dádiva", en "dos viviendas en una zona privilegiada de Alicante".

Sin embargo, Ripoll ya estaba en la trama y en las grabaciones de la policía desde mucho tiempo antes. El presidente de la Diputación había conspirado para adjudicar la planta de basuras a Fenoll. Ahora se trataba de lograr que Ortiz se repartiera tarta con Fenoll, que financiaba al PP alicantino y, en especial, al de Orihuela y la Vega Baja.

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La investigación de la policía se estructura en capítulos, con actores diferentes, desde que la vigilancia detecta a principios de 2007 los movimientos de Ángel Fenoll para hacerse con la adjudicación hasta que, tras la adjudicación, se modifica el emplazamiento para que coincida con unos terrenos de este empresario. El presidente de la Diputación de Alicante, aludido como "el jefe", el "presi" e incluso, a veces, por el apodo de pitu, es el centro de todos los capítulos, en los que son también personajes fijos Fenoll y el intermediario Gregori, con el que el primero firmó un contrato de prestación de servicios por su mediación para la obtención de la contrata. Según ese contrato, requisado por la policía el 30 de mayo de 2007 en la empresa Colsur, cuando fueron detenidos Fenoll y su hijo, recibiría "50 céntimos por tonelada métrica de residuo recogido" durante los 20 años que durara la concesión. Gregori prestaba, pues, sus servicios a Fenoll con Ripoll, mientras el empresario de Orihuela compraba voluntades entre políticos y técnicos, hasta que quedó claro que la adjudicación sería para Enrique Ortiz. Entonces intermedió entre Fenoll y Ortiz y entre Ortiz y Ripoll, hasta alcanzar lo que la policía describe como "un pacto secreto promovido por altas instancias de la Diputación de Alicante" entre Cespa-Ortiz y la mercantil Proambiente, de Ángel Fenoll, "en aras a repartirse la adjudicación del Plan Zonal".

Es en la primera fase -en la que Fenoll aspiraba con el apoyo de Ripoll a esa adjudicación- cuando se vio involucrado en el caso el portavoz socialista en la Diputación de Alicante, Antonio Amorós, que dimitió el viernes y fue suspendido de militancia por el PSPV-PSOE. Amorós, a quien la policía intervino el teléfono, hablaba del concurso con Fenoll en conversaciones y en citas que los investigadores grabaron. También el ex secretario de Finanzas de los socialistas valencianos Josep Maria Cataluña habló y se encontró con Fenoll. "¿Cuándo acaba el plazo ese de la Diputación?", pregunta Cataluña en una llamada. "El día cuatro o por ahí", responde Fenoll. "Vale, vale, entonces tenemos tiempo", replica Cataluña. Los socialistas, más adelante, pasaron a ser prescindibles.

Antonio Amorós (a la izquierda), junto al empresario Ángel Fenoll.
Antonio Amorós (a la izquierda), junto al empresario Ángel Fenoll.
La policía que investiga el supuesto amaño de un concurso de basuras (un contrato de 18 millones de euros por 20 años) siguió hasta Sevilla a la supuesta trama corrupta, encabezada por el empresario Enrique Ortiz (adjudicatario), y de la que formaba parte José Joaquín Ripoll, presidente de la Diputación de Alicante. En la foto de la izquierda, Ortiz con su mujer; en la del centro, con la esposa de Ripoll. El presidente de la Diputación, en la fotografía de la derecha, al abandonar la caseta.
La policía que investiga el supuesto amaño de un concurso de basuras (un contrato de 18 millones de euros por 20 años) siguió hasta Sevilla a la supuesta trama corrupta, encabezada por el empresario Enrique Ortiz (adjudicatario), y de la que formaba parte José Joaquín Ripoll, presidente de la Diputación de Alicante. En la foto de la izquierda, Ortiz con su mujer; en la del centro, con la esposa de Ripoll. El presidente de la Diputación, en la fotografía de la derecha, al abandonar la caseta.

"Todo cariño, te hubiera gustado"

Fenoll afirma sobre Antonio Amorós (portavoz socialista en la Diputación) en respuesta a un interlocutor que le pregunta si ha tenido que "darle cariño": "Todo cariño, todo cariño. Ayer te hubiera gustado verme. Nada más que me faltaba ponerme de rodillas delante de él. Hombre, yo de él soy bastante... Porque nunca le he fallado y tal. Y en fin. Tengo al marido de su sobrina, como te comenté, trabajando allí, en la planta. ¿Sabes?".

"Se la quieren hacer a Ripoll"

Pedro Joaquín Meseguer (coordinador de la campaña electoral de la alcaldesa de Orihuela, Mònica Lorente, del PP): El otro tema... ¿cómo lo llevas?

Fenoll: ¿El otro tema? Bueno, se la quieren hacer a Ripoll, como hay dos de la conselleria.

Meseguer: Entonces se la van a hacer...

"Ya está, chaval"

Enrique Ortiz (al enterarse de que su empresa ha resultado ser adjudicataria de la planta de residuos): Sí, ya está, ya está, chaval, ya está.

Rafael Gregori: Sí. Entonces me debes una buena invitación, ¿eh?

Ortiz: Te debo una comida.

Gregori: Una buena comida.

Ortiz: Pero de rabo.

Gregori: Sí. Enhorabuena, Enrique, ¿n0?

Ortiz: Esta... esta es para felicitarnos, se ha hecho un trabajo bien hecho.

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