El fiscal pedirá que Millet y Montull declaren por las comisiones a CDC

La fiscalía de Barcelona pedirá al juez Juli Solaz la próxima semana que cite a declarar de nuevo a los saqueadores confesos del Palau de la Música, Fèlix Millet y Jordi Montull, así como a la hija de este, Gemma Montull para interrogarles, entre otras cuestiones, sobre el supuesto pago de comisiones a Convergència Democràtica (CDC).

Los tres imputados ya comparecieron en el juzgado hace un año, pero en aquella ocasión el juez no permitió preguntas que no recogía la querella inicial del fiscal Emilio Sánchez Ulled. Desde entonces ha llovido mucho y la querella, que algunos consideraron temeraria, se ha demostrado la punta del iceberg de un saqueo sin precedentes en España en una entidad cultural. Tanto es así que los 2,29 millones de euros que el fiscal consideraba entonces que se habían desviado de las arcas del Palau serían en realidad 35,1 millones, según recoge el informe de los peritos de Hacienda entregado al juzgado. Y de esa cantidad, 5,9 millones podrían haber sido pagados entre 2001 y 2008 por la constructora Ferrovial para hacerse con obras de las administraciones gobernadas por CDC.

El abogado Pina reclama más tiempo para estudiar el informe de Hacienda

Esas comisiones supondrían el 4% del presupuesto de las obras y, según los peritos, el Palau de la Música se quedaba con entre el 0,5% y el 1,5%, y el resto iba a parar a las arcas de CDC, tanto en efectivo como a través de la Fundación Ramon Trias Fargas.

Así las cosas, la investigación judicial podría entrar en una nueva fase y convertirse en una piedra en el zapato para Artur Mas, lo que explica el interés de los abogados del despacho de Pau Molins, de reconocido marchamo convergente y que ahora sólo defienden a los Montull, por intentar evitarlo. Así se explica la solicitud que han presentado al juez para que aplace un mes la comparecencia de los peritos de Hacienda, prevista para el 1 de octubre, con el argumento de que para entonces no habrán tenido tiempo de estudiar el informe que les fue entregado el 4 de agosto. Al parecer el juez tiene intención de ceder parcialmente a la petición y posponer la declaración unos días, pero todavía no hay nada acordado.

Esta parte de la investigación puede acabar siendo una pieza separada de la causa. Al menos es lo que sopesa la fiscalía y es muy posible que así lo solicite al juez Solaz cuando declaren los testigos. "De momento vamos por partes. Primero que declaren de nuevo Millet, Montull y Gemma, y luego ya veremos. Si hace faltar llamarles de nuevo, se les llamará", aseguran fuentes de la fiscalía.

En ese interrogatorio los tres principales acusados deberán responder no solo de las cantidades desviadas, sino también del destino y la utilización del dinero. El trabajo de los nuevos gestores del Palau ha determinado que una parte del botín fue también a los bolsillos de los Millet y los Montull en forma de pagos a las empresas de sus esposas por trabajos no realizados, a sufragar sus lujosas vacaciones y a costear las reformas de sus viviendas.