El bromista que alegra las horas de encierro
Víctor Zamora, de 33 años y un hijo, es el bromista oficial del grupo. Cuando su madre, Nelly Bugueño, le decía que dejara esa mina, él le contestaba: "Si el cerro me ve y se echa a un lado de feo que soy, no te preocupes". "Nos ha escrito que se alegra de estar ahí abajo porque así no tiene que lavarse. Dice que le pasó esto porque se cansó de bañarse", comenta su madre. "De pequeño, yo lo mandaba a ducharse y lo oía decir, qué rica está el agua... Pero se quedaba fuera de la ducha, mojándose la cara con los dedos. De nunca le gustó el agua. Si usted lo conociera vería que es pura broma. Es difícil verlo enojado".
Hace dos meses, sin embargo, se le cortó la sonrisa. Una plancha de piedra cayó sobre un compañero y tuvieron que amputarle la pierna. Él escapó por los pelos.